El propietario de “X” (antes Twitter), Elon Musk, estaría dispuesto a llevar a instancias judiciales las acciones que el multimillonario progresista George Soros ejecuta a través de distintas organizaciones financiadas por su enorme imperio.
Si el año pasado el fundador de Tesla alertaba sobre presiones a grandes marcas para que estas dejaran de anunciar en la red social (debido a la inminente compra por parte de Musk), ahora el dueño de la plataforma —y defensor de la libertad expresión— asegura que pondrá manos a la obra en contra del fundador de Open Society Foundations.
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“X presentará acciones legales para detener esto. ¡No puedo esperar a que comience el descubrimiento!”, escribió Elon Musk en respuesta a un artículo firmado por el periodista irlandés Ben Scallan y titulado “Las ONG financiadas por Soros exigen medidas enérgicas contra la libertad de expresión mientras los políticos difunden información errónea sobre el odio”.
Exactly.
X will be filing legal action to stop this. Can’t wait for discovery to start! https://t.co/ROxXEuO8it
— Elon Musk (@elonmusk) August 23, 2023
Los tentáculos de Soros
El texto en cuestión también plantea que según los políticos del país europeo, el odio hacia las minorías raciales, religiosas y sexuales “está aumentando peligrosamente en Irlanda”. Sin embargo, el periodista cuestiona la afirmación y explica que el aumento de los “delitos basados en el odio” se debe “a mayor cantidad de denuncias, mas no a crímenes o ‘incidentes’ de odio reales”. Aún así, toda la retórica que están exponiendo activistas sería un pretexto para aprobar una nueva y estricta ley sobre “discurso de odio”, que según el autor “tipificaría como delito la posesión de ‘material supuestamente de odio'”. Acá es cuando entraría la agenda de Soros que Elon Musk podría pretender frenar con la justicia.
Los tentáculos del multimillonario progresista parecen estar extendidos por todo el mundo. Estados Unidos forma parte de los planes globalistas de Soros. En el país norteamericano ha financiado campañas políticas de fiscales dentro del sistema judicial y dona dinero a organizaciones como Access Now, que dice defender “los derechos digitales de las personas y comunidades en riesgo” cuando no sería otra cosa que un vehículo para propagar ideas afines a la agenda ideológica del empresario y defensor de temas como la ideología de género y el aborto.
Por su parte, desde que adquirió Twitter (hoy X), Elon Musk asegura que defiende el libre discurso y restableció cuentas que habían sido censuradas por la anterior junta directiva.