Si el magnate George Soros ha destacado como el máximo financista del mal llamado progresismo con millonarias donaciones a gobiernos de izquierda y auspicio a causas disfrazadas de derechos humanos como el aborto y la ideología de género, su heredero, Álex Soros, a quien ha cedido el control de su imperio, promete ir mucho más allá, pues no solo se ha comprometido con defender el legado de su padre sino que además ha asegurado que será “más político”.
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En su primera entrevista como sucesor de George Soros, de 92 años, su hijo Álex Soros, de 37, dijo a The Wall Street Journal que le preocupa la idea de que el expresidente Donald Trump pueda volver a la Casa Blanca, lo que constituye un abrebocas de sus objetivos.
Frenar a Donald Trump
“Me encantaría ver que el dinero no jugara un papel tan importante en la política, pero mientras la otra parte lo haga, vamos a tener que seguir haciéndolo también”, dijo Álex Soros en la entrevista en la que admitió que él es “más político” que su padre y no dudó en expresar su rechazo a Trump. Las cuentas entonces están claras.
No hay que olvidar que George Soros ha sido uno de los mayores financistas del Partido Demócrata. Solo en abril de 2021 donó 20 millones de dólares para una campaña que busca reunir a los progresistas de EE. UU. con el fin de apoyar los billonarios planes de infraestructura y de bienestar social del presidente Joe Biden. Adicionalmente, un informe de Law Enforcement Legal Defense Fund, publicado hace un año, determinó que el fundador de Open Society Foundations financió Comités de Acción Política (PAC) por un monto de 40 millones de dólares en la última década que le permitió garantizar la elección de un total de 75 fiscales estadounidenses que hoy aplican lo que él llama “justicia social”. Incluso en Latinoamérica ha metido sus manos. La vicepresidente de Colombia, Francia Márquez, reconoció recientemente recibir financiamiento de las organizaciones de los Soros.
Protagonismo político
El protagonismo político de Álex Soros ha sido más que evidente. Ha visitado al menos 14 veces la Casa Blanca durante la actual administración demócrata. Durante la campaña de 2020 se refirió a Kamala Harris como la futura vicepresidente y posó junto a ella en redes sociales, lo cual se ha repetido una vez en el cargo.
Pero esta no es la única figura política con la que se le ha visto al sucesor de George Soros. El propio presidente Joe Biden también lo ha recibido y se han fotografiado juntos. Álex Soros ha compartido también con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez; con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau; con el presidente francés, Emmanuel Macron; con el expresidente estadounidense, Barack Obama; y con la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Interesado en los votos
Soros hijo apoya los programas que alientan a los latinos y afroamericanos a votar, tal vez por esta razón ha sido muy cercano a la senadora Stacey Abrams, con quien colaboró en la elaboración de estrategias para mejorar la participación electoral, enfocándose en conseguir votos de las comunidades negras y latinas.
Una agenda “más progresista”
Aunque ya el magnate George Soros ha destacado como financista de los movimientos pro aborto y la agenda LGBT a través de su Open Society Foundations, su hijo Álex Soros es incluso considerado por la prensa como más inclinado que su padre a abrazar estas causas.
No hay que olvidar que la organización que queda en sus manos destina unos 1500 millones de dólares anuales a la “defensa de los derechos humanos” entre los que entran la ideología de género y la llamada interrupción voluntaria del embarazo. Se estima que la fortuna total del imperio Soros ronda los 25.000 millones de dólares.