Pensaron que vender armas de guerra en Facebook sería el negocio de sus vidas. Con esa idea, cuatro militares activos del Ejército chileno robaron tres lanzacohetes modelos AT4, dos escopetas, una pistola semiautomática glock con dos cargadores, municiones calibre 16, 12 y 38, ocho cartuchos de guerra 556 y 24 más de calibre 762 para comercializarlos en la red social, pero la Policía de Investigaciones (PDI) descubrió el negocio ilegal en una operación encubierta.
Funcionarios de la Brigada contra el Crimen Organizado engañaron a los militares chilenos simulando una compra. Los agentes pactaron un encuentro con Juan José Sepúlveda, quien fungía como vendedor y ofrecía los lanzacohetes modelo AT4 en 2.500.000 de pesos, un monto que alcanza los 2650 dólares.
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Una vez que Sepúlveda entregó el arma y recibió el pago acordado, detectives de la PDI que monitoreaban el encuentro lo detuvieron. De acuerdo con La Tercera, luego de ser aprehendido reveló que el arma pertenecía a Carlos Parada Donoso, un funcionario activo del Ejército con quien supuestamente pactó compartir las ganancias de la transacción.
Cinco imputados
Luego de Sepúlveda revelar que Parada le había entregado el material bélico, propició el allanamiento a las viviendas de otros dos uniformados –un teniente y un cabo– del Ejército también relacionados con la cadena de sustracción de los equipos propiedad de una sede de la institución castrense ubicada en la zona norte de la Región Metropolitana de Santiago.
La Fiscalía divulgó que hay cinco imputados por violar al artículo 10 de la Ley Nº17.798 de Control de Armas, cuatro militares chilenos y un civil. De ellos, dos militares y el civil están en prisión preventiva, mientras que los otros dos militares cumplirán arresto domiciliario.
🔴En prisión preventiva quedan 3 imputados (2 funcionarios activos del Ejército y 1 civil), que se dedicaban al Tráfico de Armas,incluyendo armamento de guerra. Otros 2 detenidos c/arresto nocturno. Investigación de Fiscal de Pudahuel Daniel Contreras y BRICO @PDI_CHILE pic.twitter.com/VoJPQLuqXu
— Fiscalía Metropolitana Occidente (@Fisc_Occidente) October 20, 2023
“Rechazamos enérgicamente cualquier conducta que pueda ser constitutiva de delito, así como aquellas que vulneran el ordenamiento legal y la reglamentación vigente”, expresó en un comunicado el Ejército chileno.
Sin embargo, la práctica está calando dentro de la institución, considerando que en junio el Sexto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó al exsargento segundo de la institución militar, Víctor Gabriel Roa Alburquenque, a 12 años de presidio efectivo, y lo inhabilitó de forma perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos por el delito consumado de tráfico de municiones, tráfico de arma prohibida y tenencia ilegal de arma de fuego, en calidad de autor luego de comprobar que el exuniformado sustrajo las armas desde los almacenes o polvorines del Ejército en Batuco para venderlas a un narcotraficante.
Un historial de irregularidades
Un informe del Centro de Investigación Periodística de Chile (Ciper) revela que en los últimos diez años se han contabilizado 38 casos de robo o desaparición de armas, municiones, explosivos y otros pertrechos de instancias militares y policiales que han dejado tras las rejas a 54 uniformados.
Durante las investigaciones, los oficiales sentenciados reconocieron que vendieron fusiles valorados en 1.300.000 pesos, granadas por 30.000 pesos, pistolas vendidas en 300.000 y revólveres a 100.000. Así consta en los expedientes de las sentencias dictadas entre 2012 y 2022 por la Corte Marcial de Santiago (que tiene jurisdicción sobre Carabineros, Ejército y Fuerza Aérea) y la Corte Marcial de la Armada (que funciona en Valparaíso).
En varias sentencias se constataron precios que sobrepasan el 100 % y, en algunos casos, hasta 200 % del valor original. Con estas armas, hasta ahora, el mercado ilegal ha facilitado la tenencia de 500.000 unidades sin registro ante la Dirección General de Movilización Nacional, adscrita al Ministerio de Defensa. Uno de los sospechosos de contribuir con esta cifra es el presidente de los armeros de Chile, Ennio Mangiola, quien en julio fue detenido por traficar armas a organizaciones delictuales.
Es una situación para espantarse, cuando los militares chilenos lograron burlar las restricciones de Meta (propietaria de Facebook) y existen chilenos relacionados al yihadismo en Irak y en Europa que podrían estar interesados en captar estas armas en medio de los ataques de Hamás a Israel.