Al presidente izquierdista de Perú, Pedro Castillo, le tocará explicar ante el Ministerio Público las razones que lo condujeron a destituir sin previo aviso al excomandante del Ejército peruano, José Vizcarra, y al excomandante de la Fuerza Aérea, Jorge Chaparro, para presuntamente favorecer a los coroneles cercanos a su círculo político, Ciro Bocanegra y Carlos Sánchez.
Aunque el mandatario se libró recientemente de enfrentar un juicio político en el Congreso, no podrá evadir la comparecencia ante la Fiscalía, pautada para este 29 de diciembre por la denuncia interpuesta en su contra.
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El Ministerio Público anunció a través de su cuenta de Twitter que la fiscal Zoraida Avalos programó el interrogatorio para las 10:00 de la mañana para “recoger su testimonio, en relación con la investigación por presuntas injerencias del Poder Ejecutivo en el proceso de ascensos” en las Fuerzas Armadas.
La Fiscal de la Nación, Zoraida Avalos reprogramó para el 29 de diciembre a las 10:00 am, la citación al presidente Pedro Castillo a fin de recoger su testimonio, en relación a la investigación por presuntas injerencias del Poder Ejecutivo en el proceso de ascensos en las FFAA. pic.twitter.com/rSEGdeTrFR
— Ministerio Público (@FiscaliaPeru) December 20, 2021
En fase preliminar
La fiscal general tomará las declaraciones de Castillo en el Palacio de Gobierno de Lima como parte de una investigación preliminar por las denuncias de interferencias en los ascensos militares que fueron presentadas por Vizcarra y Chaparro, quienes habían sido designados por Castillo al inicio de su mandato y cesados repentinamente.
Ambos ya ofrecieron sus declaraciones al ente que también contempla interrogar a otros cinco oficiales a los que presuntamente buscaba favorecer el Ejecutivo.
La versión de ambos coincide en que recibieron presiones del entonces ministro de Defensa, Walter Ayala, y del secretario general de Palacio, Bruno Pacheco, para ascender de manera irregular a unos efectivos castrenses.
El general José Vizcarra presentó como evidencia las conversaciones por WhatsApp con Castillo y Ayala, donde días antes del proceso, el mandatario le solicitó que conversara con el secretario de Palacio porque le tenía “un encargo”.
Niegan participación
Ayala y Pacheco ya no están al lado de Castillo. Los dos renunciaron a sus cargos y negaron las acusaciones, pero para la tercera vicepresidente del Congreso, Patricia Chirinos, incurrieron en “delitos de coacción, patrocinio ilegal» y solicita «autorizar el procesamiento judicial”.
Walter Ayala defiende la legalidad de su actuación y cree que todo es parte de una «politiquería» que impide gobernar a Castillo. Incluso asegura que tiene “la conciencia limpia”. Él presentó su dimisión después de la interpelación en la comisión de Defensa del Congreso.
Bruno Pacheco mantiene un discurso similar. Afirma que no ha hecho “nada indebido”, pero daba un paso al costado para proteger al mandatario de una “campaña de desprestigio”. Según su versión, salió con la “frente en alto y la seguridad de que se probará la inocencia”.