Hasta esta mañana en Argentina la discusión giraba casi con exclusividad alrededor de los temas económicos y las desregulaciones del DNU y la “ley Bases” que impulsa el Poder Ejecutivo. Aunque Patricia Bullrich sea una de las ministras de más alto perfil (a pesar de que la inseguridad aún no dé tregua), el debate político estaba limitado a cuestiones como los votos en la Cámara de Diputados para una media sanción que podría tener lugar la próxima semana.
Sin embargo, como suele pasar en este país, todo cambió de un momento a otro. El horrible crimen de Umma, una nena de nueve años, sacudió a la sociedad e impactó de lleno en la política. Es que, además del claro perfil de Javier Milei y Bullrich con respecto a la delincuencia, la pequeña era hija de uno de los custodios de la ministra de Seguridad. Su madre también pertenecía a la Policía Federal.
El fatídico hecho tuvo lugar esta mañana en Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires. El padre de la criatura asesinada manejaba el vehículo familiar con dirección hacia la calle, mientras su esposa cerraba el portón, cuando fueron interceptados por otro auto. Sin tiempo para pensar, y a pesar de portar su arma reglamentaria, Eduardo atinó a alejar el vehículo de los agresores, donde se encontraba a bordo la nena. Sin explicación lógica y ni racional, uno de los delincuentes abre fuego contra el vidrio trasero, disparándole en la cabeza a la criatura, que murió luego en el hospital Churruca, que atiende a la policía y sus familiares.
“Umma tenía 9 años y fue asesinada cobardemente. Envío mis más sinceras condolencias a sus papás, María Eugenia y Eduardo, ambos efectivos de nuestra Policía Federal. Cuentan con mi apoyo y el de todo el Gobierno Nacional. Los delincuentes creen que siguen viviendo en la Argentina de la impunidad pero se equivocan. Los vamos a encontrar y vamos a hacer que paguen por la vida que se llevaron y por la familia que destruyeron”, escribió desde sus redes sociales el presidente Milei.
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En el mismo sentido se expresó toda la plana mayor del gobierno. El titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, lamentó el trágico hecho y pidió no tener “ninguna tolerancia con los delincuentes”, a los que llamó a aplicarles “todo el peso de la ley”.
Patricia Bullrich agregó que estos criminales “no tienen perdón” y que el Estado los buscará hasta encontrarlos. Por su parte, el diputado José Luis Espert compartió una foto de un queso gruyer, dando a entender que los asesinos de Umma merecen “bala”, como suele decir desde sus redes sociales.
A los asesinos de Umma. pic.twitter.com/AHa2GOi6gq
— José Luis Espert (@jlespert) January 22, 2024
Claro que el debate contra el kirchnerismo no tardó en llegar. El asesinato tuvo lugar en la provincia gobernada por Axel Kicillof, que apunta a convertirse en el próximo candidato del cristinismo duro, lo que dejó al economista en el ojo de la tormenta. Cabe destacar que el trágico hecho tuvo lugar en medio de los intensos debates de comisión, donde legisladores kirchneristas como Natalia Zaracho insisten con la idea de justificar a los delincuentes, ya que habrían elegido ese “modo de vida” como consecuencia de la falta de oportunidades. Hasta el momento, el gobernador bonaerense no se ha pronunciado al respecto. Como era de esperar, tampoco lo hizo la izquierda.
Por su parte, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, ya anticipó que los cambios en materia del Código Penal deberían estar por caer. En su opinión, es de vital importancia implementar las reformas para que este tipo de delitos “sean juzgados y condenados con las penas de prisión que correspondan y de la manera más rápida posible”.
Por el momento clave en que este fatídico hecho tuvo lugar, es de esperar que se termine generando un antes y un después en materia del combate contra la delincuencia en Argentina. Lo espeluznante de la muerte una pequeña niña inocente, que casualmente resultó ser hija de un custodio de una ministra de Seguridad, que está decidida a generar un cambio profundo, y que además cuenta con todo el respaldo del presidente… Sin dudas generará un precedente importante. No porque esta muerte sea más grave que otras, ya que en todos los casos hay familias destruidas por igual, pero con respecto a la muerte de Umma parecen concatenarse todos los elementos como para esto sea el inicio de algo.
Lógicamente, el sentir de la opinión pública está en sintonía con la búsqueda de justicia y de reforma radical que propone el gobierno, que considera que estas cosas no pueden seguir pasando. El kirchnerismo y la izquierda vuelven a quedar a contramano.