¿Qué es el INADI? Algo que tendría que liquidar el próximo gobierno el primer día de gestión, junto a un decreto presidencial que pida disculpas en nombre del Estado a los contribuyentes por tener que financiar semejante desgracia. Su sigla también dice que es el “Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo”, en teoría otro de los tantos organismos “descentralizados” del Estado que no sirven más que como bolsa de trabajo para la militancia oficialista. En la actualidad lo regentea Victoria Donda, una fiel representante del pensamiento políticamente correcto del kirchnerismo más ideologizado en las más elevadas estupideces.
El “instituto” en cuestión acaba de emitir un documento oficial de 21 páginas para los periodistas deportivos que cubran el mundial de Catar para el público argentino. El texto fue redactado junto a la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, otro ente superfluo que podría ser tranquilamente erradicado en nombre del tan necesario ordenamiento fiscal nacional.
El manual de lo políticamente correcto fue realizado con el fin de “brindar herramientas para quienes trabajan en los medios y garantizar coberturas que no vulneren derechos”. ¿Cuáles derechos se vulnerarían desde la transmisión de un partido de fútbol? Por ejemplo, el de “los negros”, según consideran los iluminados del INADI. Argentina, a diferencia de lo que considera Donda, afortunadamente no es un país racista. Es más, aquí, el mote de “nergo” es afectivo o cariñoso. De ninguna manera ofensivo, descalificativo o racista. Es por eso que “el negro” Astrada es así denominado por los hinchas de River que lo admiran. Lo mismo con “el negro” Ibarra, que acaba de sacar campeón a Boca. Ahora, para las mentes enfermizas de estos entes parasitarios gubernamentales, habría que buscarles otros sobrenombres como “morocho” o “persona no rubia”. Un delirio por donde se le mire.
Pero la cuestión de lo “negro” no aplica solamente para las personas. También piden eliminar el color de todo lo que pueda decirse con una connotación negativa. Ya ejemplificando, porque no se perdieron de nada, el INADI recomienda no hablar de “la suerte negra” de un equipo. La burocracia bien paga y vigilante del pensamiento políticamente incorrecto sugiere decir: “la situación del equipo es muy complicada”. Tampoco recomiendan hablar de “mercado negro” si se mencionan las transacciones informales de las reventas de entrada. Para ellos se dice “circuito clandestino”.
Como si esto fuera poco, casi invitando a la censura, proponen “evitar la difusión de imágenes violentas”. En este sentido solicitan evitar la transmisión de “patadas”, “disturbios”, “banderas” (¿?) o “invasiones al campo de juego. También piden “no evaluar positivamente jugadas que impliquen acciones malintencionadas”. Es decir que, los que idolatran a Diego Maradona, hoy deberían tomar otra actitud ante una jugada como la de “la mano de Dios”. En lugar de gritar el gol contra los ingleses, el INADI les pide a los relatores que señalen que el tanto fue con la mano y que no debería convalidarse.
Otro detalle insólito del manual es la sugerencia de evitar la “sexualización” o “cosificación” de la mujer. En este sentido, proponen evitar comentarios como “¡Qué bellas son las hinchas de Croacia!”. Sí…dice eso el manual. Finalmente, les dejan a los periodistas el consejo de no utilizar preconceptos de las masculinidades tradicionales. Por lo tanto, no deberían hablar de un plantel “que demuestra su hombría” en el campo de juego.
Para mantener estos organismos, el Estado argentino se endeuda e imprime los billetes que generan inflación.