Lejos de desaparecer, el conflicto entre el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el subsecretario de Energía kirchnerista, Federico Basualdo, el problema sigue escalando. Cada día que pasa, el titular de la cartera de Hacienda está más desgastado a causa de la rebeldía del hombre de Cristina Kirchner que se niega a abandonar su puesto, pero las esquirlas llegan hasta al jefe de Gabinete, y claro, al mismo presidente de la Nación. Anoche, Patricia Bullrich hizo referencia a esta situación y aseguró que Alberto Fernández “no tiene autoridad”.
En diálogo con el periodista Joaquín Morales Solá, la exministra de Seguridad de Cambiemos, señaló: “Si no puede sacar a un subsecretario que se pelea con Guzmán, el presidente no tiene autoridad”.
Para la referente del ala dura del macrismo, la interna entre Guzmán y Basualdo, representa una “contradicción total” en el Gobierno, que deja sin rumbo a la Argentina y pone en evidencia las diferentes e irreconciliables visiones de los distintos espacios que pertenecen al Frente de Todos.
“Esto pone blanco sobre negro el modelo Guzmán versus el kirchnerismo”, resaltó Bullrich. Para “la piba”, Alberto Fernández debería decir que el subsecretario se vaya en 24 horas y “aguantarse” la situación. “El presidente se queda sin ninguna autoridad”, repitió.
Alberto mudo y el kirchnerismo que juega fuerte
Desde el riñón de CFK, no tienen reparos en hablar en off con la prensa, para dar la perspectiva K de la situación. Aseguran que Guzmán busca un incremento (en realidad sería una actualización) de tarifas de alrededor del 40 %, en sintonía con lo comprometido ante el Fondo Monetario Internacional. El kirchnerismo duro anticipa que no hay ninguna posibilidad que esto se haga efectivo y que el ministro de Economía terminará igual que la extitular de la cartera de Justicia Marcela Losardo. Es decir, eyectada de su cargo por presión de la vicepresidente, su espacio y su agenda.
Quien salió a echar más leña al fuego es el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. El economista preferido de CFK respaldó al subsecretario de Energía Basualdo y aseguró que es “un excelente funcionario”. Mientras tanto, Alberto Fernández no dice una sola palabra y su silencio es ensordecedor.
Guatemala y Guatepeor
Ante este complejo panorama, y en medio de las negociaciones con el FMI, los pocos ejecutivos del sistema financiero en Nueva York y analistas interesados en Argentina emitieron algunas declaraciones informales. La situación, coinciden, es muy complicada. Reconocen que nadie “extrañaría” a Guzmán en caso de abandonar su puesto, pero que las alternativas para su cargo, como por ejemplo Paula Español, impulsora y fanática de los controles de precios, son directamente terroríficas.
Sin embargo, coinciden que el actual ministro ya quedó demasiado desgastado como para recuperar la iniciativa y dominar la agenda. Con este panorama, y sin buenas expectativas, las opciones en el horizonte van solamente de malas a muy malas.