Esta semana comenzó con una conmoción dentro del Partido Republicano, la cual se vio reflejada en el Congreso. El lunes 2 de octubre, el senador Rand Paul criticó el marco de la reforma tributaria que funcionarios de la administración Trump y líderes del Congreso presentaron la semana pasada. La base de la crítica es el aumento de impuestos para la clase media. Esto a su vez despierta la inquietud sobre la influencia libertaria de Rand dentro del partido históricamente conservador.
Bajo el marco del reciente plan de la Casa Blanca y de los líderes republicanos que están en el Congreso, el análisis del TPC (Centro de Políticas Tributarias [Tax Policy Center])indica que para el año 2027 se aumentarán los ingresos de alrededor del 30 % de los contribuyentes con ingresos entre USD $50.000 y USD $150.000. Asimismo, el TPC informa que en total, alrededor del 25 % de los contribuyentes verían mayores impuestos bajo el plan del Partido Republicano dentro de 10 años.
El senador manifestó su inconformidad por medio de la red social Twitter. En el trino expresó: ¿Este es un plan de impuestos del Partido Republicano? ¿suban los impuestos del 30 % de la clase media? Espero que los resultados finales sean mejores que esto. Junto a su inconformidad anexó un enlace al TPC.
This is a GOP tax plan? Possibly 30% of middle class gets a tax hike? I hope the final details are better than this. https://t.co/lcjkI4YRz8
— Senator Rand Paul (@RandPaul) October 2, 2017
En respuesta, en un comunicado, el presidente de la Comisión de Medios y Compensaciones de la Cámara de Representantes, republicano del Estado de Texas, Kevin Brady, dijo:
“Este supuesto estudio es engañoso, infundado y sesgado. TPC hace una variedad de suposiciones excesivas y poco realistas sobre las decisiones de política que los miembros del Congreso todavía tienen que hacer mientras preparamos la legislación fiscal para el crecimiento”.
Según reporta un artículo de la plataforma digital de noticias The Hill:
“El marco tributario está diseñado para proporcionar directrices para los paneles de escritura de impuestos a medida que escriben la legislación [y] El plan colapsaría los actuales siete corchetes individuales a tres, de 12 %, 25 % y 35 %. También deja la puerta abierta para una tarifa adicional sobre el 35 % para los contribuyentes más ricos. Además, el plan pide casi duplicar la deducción estándar y ampliar el crédito tributario por cada hijo mientras elimina la mayoría de las deducciones detalladas.”
El rechazo a estas medidas por parte del senador republicano, invita a un debate de instancias previas, sobre si en efecto el Senador Rand Paul es libertario. Para David Boaz, vicepresidente del Instituto Cato, autor de La Mente Libertaria: Un Manifiesto por la Libertad:
“Paul no aduce ser un libertario, y toma posiciones con las que muchos libertarios no están de acuerdo. Pero en una amplia gama de temas, desde el gasto y la regulación hasta el espionaje gubernamental, las guerras contra las drogas y la intervención militar, tiene una agenda política más libertaria que cualquier otro candidato importante que podamos recordar.”
Así lo publicó en una columna de opinión en medio de la campaña electoral, cuando Paul se lanzó como pre-candidato presidencial para el partido republicano, titulada ¿Es Rand Paul un verdadero libertario?
En su columna, menciona que frente a un público en la Universidad de Harvard, Paul dijo que quiere “una influencia libertaria en el Partido Republicano”.
También en el texto, Boaz cita al escritor conservador Michael Brendan Dougherty, quien dice que los libertarios deben entender que Paul está “empujando” al Partido Republicano en su dirección: “Paul frecuentemente ofrece hostilidad retórica en lugar de sanciones, sanciones en lugar de conflictos y limitados conflictos constitucionalmente autorizados en lugar de guerra abierta”.
Paul se identifica tanto como libertario conservador como constitucionalista conservador. El senador, en octubre del 2010, publicó una columna de opinión donde refleja sus posturas:
“Opto por usar una frase diferente para describir mis creencias: me considero un conservador constitucional, lo cual significa un conservador que realmente cree en un gobierno más pequeño y en una libertad más individual. Los principios libertarios de un gobierno limitado, la autosuficiencia y el respeto a la Constitución están incrustados en mi conservadurismo constitucional y en las opiniones de innumerables estadounidenses de todo el espectro político.”
Es decir, se distingue del conservador promedio aclarando que él sí busca un gobierno más pequeño y la adhesión a la constitución, mientras que muchos de los que ostentan ese título no lo llevan a la práctica. A raíz de este surgimiento de supuestos conservadores que buscan mayor interferencia estatal, surge el término “neocon” que abrevia neo-conservadurismo; una adhesión política que promueve mayor intervención estatal, incluso militar.
A través de su reciente cuestionamiento al plan impositivo del partido que integra, entre otros planteos y propuestas de reformas, Rand Paul pone en evidencia lo descrito. Busca inclinar al partido -que aduce ser conservador- hacia sus principios fundacionales por medio de la influencia libertaria, donde el Estado tiene menos control sobre los individuos y estos tienen mayor poder decisión sobre sí mismos, esto incluye sus bienes y ganancias, que se ven afectados por un plan que exige mayor presupuesto para el Estado a expensas de los ciudadanos, sobre todo la clase media.