El Gobierno de Vladímir Putin no envía militares y especialistas a Venezuela precisamente para defender a Nicolás Maduro. Al parecer, el objetivo principal de este personal es el de vigilar los negocios rusos en el país suramericano.
Una investigación de Meduza, un medio ruso exiliado en Letonia con el fin de poder ejercer “con libertad”, publicó un reportaje en el que revela que Rusia tiene especialistas en Venezuela dedicados a proteger sus activos.
Why is Russia really sending military advisers and other specialists to Venezuela? Meduza spoke to multiple vets and learned about Moscow's “geopolitical debts” in Latin America. https://t.co/qVnwGqTgTl pic.twitter.com/5Yyh91eER2
— Meduza in English (@meduza_en) July 29, 2019
“Hay tres o cuatro empresas estatales que trabajan en Venezuela, que organizaron delegaciones de equipos de seguridad privada en el país. La mayoría de los especialistas militares rusos en Venezuela recibieron 150 000 rublos (USD $2.365) por mes”, señaló Meduza.
El medio ruso también informó que “60 mercenarios realizan tareas especiales en el país suramericano que fueron encargados para trabajos como reclutar informantes en partes peligrosas de Caracas”.
Entre las tareas que sí estarían relacionadas con apoyar al régimen de Maduro estaría en trabajo de entrenamiento a miembros de la milicia y colectivos chavistas; que son grupos civiles armados por la dictadura para defender “la revolución”.
El medio de comunicación contactó a veteranos del Ejército ruso y a agencias de inteligencia que han servido en Venezuela y que tienen información de que Putin mantiene su presencia en el país suramericano para vigilar y defender sus intereses.
Tatyana Rusakova, asistente de investigación en el Centro para el Estudio de Sociedades en Crisis, dijo a Meduza que “en Rusia en este momento, son principalmente las corporaciones estatales las que trabajan con Venezuela, porque el país está simplemente en ruinas”.
“Ninguna persona normal invertiría su dinero allí. Solo Rosneft y Rostec en todo su esplendor pueden hundir dinero así, porque Rosoboronexport suministró armas, y estos contratos tienen que mantenerse”, señaló.
Rusia cree que Colombia quiere invadir Venezuela
Un funcionario ruso relató a Meduza que los especialistas militares rusos están involucrados en la región con otro propósito: repeler la agresión colombiana.
Meduza: "Especialistas militares de #Rusia también están en #Venezuela para repelir cualquier provocación o sabotaje originado desde #Colombia en contra de instalaciones petroleras".
— Mariano de Alba (@marianodealba) August 1, 2019
“La amenaza de invasión de Colombia, argumenta, es un factor importante en la política interna venezolana. El 26 de junio, hubo informes en Caracas de un nuevo intento de golpe de Estado que involucra a terroristas colombianos supuestamente contratados para asesinar a Nicolás Maduro”, señala el texto de la investigación.
Cómo esconder un avión
Según varias fuentes de Meduza, tanto los asesores militares como los profesionales de seguridad privada comenzaron a visitar Venezuela regularmente en 2017.
El fundador del Movimiento Antiglobalización de Rusia, Alexander Ionov, dijo que solo en marzo de 2019 varios vuelos partieron hacia Venezuela con especialistas rusos, y eso no incluye a la delegación oficial del Ministerio de Defensa.
“Gracias a Dios, nuestros aviones militares aún pueden cruzar el Atlántico de tal manera que los rastreadores no los atrapen (…) y luego hay vuelos civiles además de eso, y, bueno, ¿quién los cuenta? Es una frontera abierta: solo vuela a Francia y luego irás a Caracas en un vuelo de Air France”, explicó.
Según Reuters, un grupo de mercenarios rusos voló a Venezuela en la última semana de enero de 2019. Según los informes, tomaron dos vuelos fletados a Cuba y luego tomaron vuelos comerciales a Caracas. Los periodistas sugirieron que un avión dirigido por la aerolínea Rossiya llevó a los dos grupos a La Habana, pero más tarde quedó claro que el avión llevaba una delegación de la Corte Suprema rusa.
Al mismo tiempo, Meduza descubrió, una semana antes de las protestas de la oposición anunciadas por el presidente Juan Guaidó, que un avión diferente llegó a Cuba: un Boeing con el número de registro VP-BJL, propiedad de Nordwind Airlines. El avión aterrizó en el aeropuerto de Varadero el 22 de enero.
Nordwind, que firmó un contrato con Rosneft en diciembre de 2018, era la aerolínea que transportaba especialistas rusos a Venezuela. Incluso el periódico de investigación Novaya Gazeta alegó que la aerolínea pudo haber servido como intermediario para ayudar a vender oro venezolano.
Rusia ha sido crucial para que Maduro se mantenga en el poder
El principal vínculo que la dictadura en Venezuela mantiene con Rusia es la millonaria deuda que el país suramericano tiene que pagarle.
La petrolera estatal rusa Rosneft ha sido clave, pues Venezuela le debe mucho dinero. De acuerdo con el estadounidense Elliott Abrams, representante especial para Venezuela, el año pasado la deuda del país suramericano era de 8 000 millones de dólares.
“Cuando sancionamos a Pdvsa [la petrolera pública venezolana] lo primero que hizo Venezuela fue acudir a Rosneft para que les ayudara a vender el petróleo que antes comprábamos aquí en EE. UU. Y Rosneft lo ha hecho, y está claro que lo hace porque Putin se lo ordena”, sentenció Abrams.
En junio el régimen chavista le regaló dos yacimientos de gas a Rusia, otorgándole el 100 % del proyecto y todos los derechos del gas explotado. Además Rosnef participa como socio minoritario en varios proyectos conjuntos de producción de petróleo en Venezuela.
A Putin no le conviene, bajo ninguna circunstancia, que Maduro abandone el poder, en parte, debido a las riquezas venezolanas. Queda esperar cómo negociará la oposición venezolana con Rusia, sobre todo luego de que ambos admitieran que se “mantienen en contacto”.