Venezuela no solo exporta una crisis migratoria única en su historia, sino que además esta va acompañada de enfermedades y posibles epidemias. Tal es el caso del sarampión, una afección que llegó a Brasil, Ecuador y Colombia gracias a venezolanos contagiados que decidieron emigrar.
De acuerdo con la agencia de noticias EFE, en lo que va de año Brasil ha registrado unos 822 casos confirmados de sarampión. La mayoría de los casos se detectaron en los estados Amazonas y Roraima, fronterizos con Venezuela. Muchos de estos casos surgieron en las comunidades indígenas yanomamis.
Vulnerabilidad epidemiológica de enfermedades ajenas al pueblo #Yanomami. Brote de #sarampion puede ser fatal para gran parte de estas comunidades ubicadas entre la frontera de Venezuela y Brasil. Si deseas conocer la noticia completa accede a https://t.co/sk9WfSyP4p pic.twitter.com/Fkj1hEgASx
— WATANIBA (@Wataniba_ve) July 22, 2018
En 2016 Brasil recibió de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el certificado de eliminación de la circulación del virus del sarampión; sin embargo, el aumento de la migración de venezolanos causó que el virus “reviviera” en esa nación.
Lo mismo sucedió en abril de este año en Ecuador, cuando tras superar más de 22 años sin el virus del sarampión, registró su primer caso procedente de Venezuela
Colombia también registró casos de sarampión provenientes de Venezuela. Hasta abril se registraron nueve casos de contagio del virus. El primer diagnóstico se hizo en Medellín a principios de marzo, y el tercero en la misma frontera, en Cúcuta, donde desde hace semanas el ministerio de Salud colombiano y organizaciones internacionales emprendieron campañas intermitentes de vacunación.
El cuarto caso de sarampión importado se dio en Arjona, municipio colombiano del departamento de Bolívar, cercano a Cartagena de Indias.
Y es que tras el inminente aumento migratorio de Venezuela, también se presenta una alerta en los países de América Latina, pues ante la escasez de medicamentos y vacunas en el país gobernado por Maduro, los venezolanos también han decidido emigrar para tratar sus afecciones.
OPS recomienda medidas urgentes
Aunque el régimen de Maduro ha mantenido ocultas las cifras oficiales epidemiológicas, la crisis en salud es innegable, a tal punto que la OPS recomendó tomar acciones urgentes.
Esta organización hizo mención al sarampión y a la difteria, debido a los innumerables casos que hay en Venezuela y ahora en la región.
En un documento divulgado en Washington la OPS menciona el “aumento significativo” de la malaria en Venezuela desde 2015, cuando se registraron 136.000 casos, que pasaron a 406.000 en 2017.
Sobre el sarampión, señala que se ha expandido a 21 de los 24 estados del país, y que entre el primer caso, que se detectó en julio de 2017, hasta este mes de junio se han confirmado 2.285 casos, de los que 1.558 corresponden a contagios ocurridos este año.
Estos son los casos de Sarampión por semana en Venezuela, ya hay brote en zonas de Brasil. Y empiezan a aparecer casos en Argentina. La única herramienta para prevenir el Sarampión es vacunarse. No se puede ajustar en Salud Pública, es más caro!!! #NuevaLeydeVacunas pic.twitter.com/NjDOAAwrKT
— Dr. Pablo Yedlin (@pyedlin) July 22, 2018
Gustavo Villasmil, médico internista y docente de la Universidad Central de Venezuela, quien junto a asociaciones médicas apeló a través de la Iglesia católica (Cáritas) la solicitud de ayuda humanitaria, le dijo al PanAm Post que el brote de cualquier enfermedad en el país “es una expresión dramática que está teniendo el mundo sobre la grave crisis humanitaria que se padece bajo el régimen chavista”.
Existe un contexto epidemiológico dado en este caso por un Estado en el cual se han derrumbado las condiciones mínimas de salud pública, por los cortes de luz, la falta de agua potable, la escasez de combustible y problemas de abastecimiento; a esto se vino a agregar un éxodo no visto en ninguna región del mundo que no solo afecta al estado Táchira, sino a toda Venezuela.
Otras enfermedades que resurgieron en Venezuela
Resurgió la poliemielitis en Venezuela, una enfermedad que había sido erradicada hace 30 años y que hoy pone en evidencia la gravedad de la crisis sanitaria en el país suramericano.
De acuerdo con especialistas del país suramericano, que llevan registros y proyecciones extraoficiales, en Venezuela hay alrededor de 2,5 millones de niños que no han sido vacunados por las fallas en el programa de inmunización nacional.
También resurgió el mal de Chagas, que ocasionó la muerte de cinco personas y el contagio de otras 40 en el estado Táchira, al occidente del país; justamente en la frontera con Colombia.
En 2012 y 2015 galenos venezolanos alertaron sobre una epidemia en Venezuela del mal de Chagas. Tres años después resurge la enfermedad en paralelo con otros brotes como el sarampión, que ya empezó a esparcirse en otros países de la región.
A finales de 2017 Venezuela registró seis potenciales epidemias que generaron alarma sanitaria. En todo el territorio resurgieron la malaria, la difteria, la tuberculosis, el sarampión, el VIH y la escabiosis.
Todo esto se da en un país donde la salud pública está en decadencia, donde las camas hospitalarias son insuficientes y el acceso a las vacunas es casi un imposible.