Recientemente los partidos Un Nuevo Tiempo (UNT) y Primero Justicia (PJ) han formalizado una alianza electoral para apoyar la candidatura de Henrique Capriles en la primaria del próximo 22 de octubre. Capriles, dos veces candidato presidencial, confirmó en 2013 que venció la elección contra Nicolás Maduro pero que entregó la victoria al dictador para evitar una supuesta guerra civil. El abierto admirador del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, no ha tenido un desempeño positivo en los sondeos de opinión, y a pesar de que estos estudios proyectan que no lograría la victoria, el partido UNT ha decidido apoyarlo.
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UNT no había presentado un candidato para participar en la primaria. A pesar de que anunciaron que participarían en el proceso y que se pensaba que el gobernador del Zulia y fundador del partido, Manuel Rosales, sería el candidato, se mantuvieron en silencio un tiempo evaluando los estudios de opinión y el desempeño de los demás aspirantes. Ellos están muy claros de que no ganarán en la primaria, por eso apuestan en este sentido al crecimiento del partido con una candidatura externa sin entrar en conflicto directo con el chavismo. En otras palabras, es una apuesta para hacer crecer el partido más allá de su región y darle un respiro nuevamente a sus estructuras a nivel nacional, sin riesgos.
En esta campaña electoral UNT podría absorber las estructuras de PJ en otros estados que se encuentran sin recursos y empobrecidas por la situación actual del país. Esta alianza es más productiva para UNT que para PJ, pensando que en unas elecciones regionales UNT tendría más posibilidades de competir por nuevas gobernaciones que las que pudiera disputar PJ luego de la primaria, comenzando de nuevo por el mismo estado Zulia: el líder zuliano con proyección nacional era Juan Pablo Guanipa, quien se convierte en el sacrificio más grande de PJ para conseguir el apoyo de UNT para Capriles. Recordemos que UNT y PJ participan en elecciones regionales con el CNE chavista.
Si esto es así, UNT podría ser el partido político que desplace el liderazgo del debilitado AD como partido socialdemócrata venezolano y con esto, apostaría a la absorción de un público chavista que podría moderarse ante la agenda de “dialogo sin conflicto” que llevan adelante los socialistas. De esa forma, podrían estarse preparando para una transición en la que ellos pudieran ser un puente con los chavistas que quieran negociar con un nuevo liderazgo opositor electo en la primaria de octubre ¿Acaso esto no les daría un valor agregado en el conjunto opositor?
Este escenario es posible si recordamos que Luis Florido, otro admirador de Lula da Silva, había declarado el pasado mes de julio que los candidatos inhabilitados deberían retirarse de la primaria. Esto ha quedado contrariado por la postura del partido al aliarse con PJ para apoyar a Capriles que se encuentra inhabilitado. Es decir, UNT sabe que María Corina Machado tiene las mayores posibilidades de ganar la primaria y podrían cambiar su postura respecto a los inhabilitados en el proceso ¿Aplicarán la misma estrategia de “diálogo sin conflicto” con María Corina Machado sólo para mantenerse presentes en el juego nacional de poder?
La apuesta de UNT en este momento es la de existir y convivir con las fuerzas vivas de un lado y del otro, lo cual podremos comprobar en lo sucesivo por las consecuencias de sus actos. ¿Es esto útil para Venezuela? Cabe a usted, apreciado lector, hacer el juicio de valor al respecto.