EnglishEl Congreso de Guatemala aprobó una resolución no vinculante que niega la existencia de motivos para cometer genocidio durante los 36 años de guerra civil del país, y pide “reconciliación nacional”. “Es legalmente imposible (…) que el genocidio haya podido ocurrir en el territorio de nuestro país durante el conflicto armado”, reza la resolución que fue aprobada el martes por 87 de los 158 diputados.
El documento fue propuesto por Luis Fernando Pérez, un legislador del partido que fundó Efraín Ríos Montt, gobernante juzgado por crímenes genocidas contra la población maya durante su mandato (1982-1983), y quien fue luego liberado por la anulación de su sentencia.
Un nuevo juicio a Montt iniciará el próximo enero.
Grupos que representan a los indígenas guatemaltecos —las principales víctimas de un estimado de 250.000 asesinatos ocurridos durante la guerra civil— han dicho que la anulación del veredicto de Ríos Montt es una negación a la justicia. Diego Rivera, líder del Movimiento de Víctimas de Quiche Norte, indicó que la decisión afecta a las personas que aun luchan por justicia. “No se puede negar que fue un genocidio. Nuestra prueba son más de 1.771 restos humanos. Nadie puede negar las masacres masivas. Es una actitud racista”.
Fuente: The Washington Post.