No es un secreto que el gobierno mexicano de Andrés Manuel López Obrador es el más izquierdista que ha tenido el país norteamericano. Sin embargo, AMLO no se ha limitado a apoyar al llamado socialismo vegetariano. También ha mostrado una estrecha cercanía con el socialismo carnívoro, ese que ha cruzado la línea del autoritarismo. Asimismo, ha adoptado estrategias salidas de esos espacios para incorporarlas a su agenda política, como cuando financió a InfodemiaMX, una falsa plataforma verificadora de fake news que protege mediáticamente a regímenes de izquierda.
Ahora, la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) lo deja nuevamente en evidencia al revelar que un excolaborador de Rafael Correa participa en labores dentro de su administración. Se llama Ismael Daniel Tovar Herrera y fue contratado para trabajar en el Palacio Nacional como coordinador de contenidos digitales de AMLO.
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Ismael Tovar Herrera fue cercano al expresidente ecuatoriano, actualmente prófugo en Bélgica por corrupción, al formar parte del Movimiento Alianza PAÍS, fundado por Correa como agrupación centroizquierdista. Con una licenciatura en Relaciones Internacionales por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desde el año 2012 se hizo cercano al exmandatario. Para el año 2013 fue colaborador del equipo de campaña en las elecciones presidenciales hasta convertirse, en mayo de 2017, en director del área que lleva el mismo nombre que su título universitario.
#ÚltimaHora 🚨: Rafael Correa, ex presidente de Ecuador, ha sido acusado de corrupción en el caso Odebrecht y sospechoso del asesinato del candidato presidencial en aquel país.
Uno de sus ex colaboradores encontró refugio en México y se incrustó en la Presidencia de la República… pic.twitter.com/3PILhayztN— Mexicanos Contra la Corrupción (@MXvsCORRUPCION) August 18, 2023
Responsable de las redes sociales
“Encontró refugio en México y se incrustó en la Presidencia de la República como responsable del manejo de las redes sociales desde el Palacio Nacional”, señala la investigación. Lo cual no hace más que reafirmar cómo AMLO ha infiltrado colaboradores de la izquierda latinoamericana para dar forma a su gestión.
Es bien sabido que la forma de hacer propaganda cambió y ya no son los medios tradicionales los canales favoritos de los políticos para ganar simpatías y acallar a sus detractores. La arena de lucha ahora está en las plataformas digitales y cada mandatario hace lo posible para lograr mayor exposición. Partiendo de esa lógica, el hallazgo sobre las labores de Tovar Herrera, cobra sentido.
Desde diciembre de 2018 a abril de 2021 ocupó el cargo de director del área de Coordinación de Contenidos Digitales, adscrita a la Coordinación de Comunicación Social que dirige Jesús Ramírez Cuevas, el vocero de la Presidencia de México. Y aunque su trabajo en Presidencia terminó, hay una acotación importante: “No aparece el informe de conclusión de ese cargo, una obligación que deben cumplir los funcionarios públicos de la administración pública federal”.
Pero el incumplimiento parece no haber importado, ya que estaría realizando labores esporádicas en el gobierno de AMLO. Por ejemplo, de mayo de 2021 a junio de 2023 colaboró como miembro del equipo de estrategia de Morena en la Ciudad de México. Luego regresó al gobierno federal, donde se desempeña como director general de Audiencias.
Ideologización chavista en libros escolares
Tampoco es la primera vez que AMLO infiltra colaboradores de la izquierda latinoamericana en su gestión. Hace unos meses tuvo que salir a defender a Sady Loaiza, exdirector de la Biblioteca Nacional de Venezuela adscrita al Ministerio de Cultura del régimen de Nicolás Maduro, debido a que se descubrió su participación en el rediseño de libros que la Secretaría de Educación Pública mexicana (SEP) distribuye gratuitamente en las escuelas.
Es decir, un chavista consagrado está detrás de textos dirigido a menores de primaria y secundaria que entrega el gobierno mexicano en el marco de esta ideologización que pretende profundizar en el supremacismo LGBT+, la sexualización de niños y la ideología de género. Además de eso, Loaiza también ocultó negocios que constan de 15 contratos desde 2019 hasta 2023 en organismos estadales y federales, que juntos representaban hace seis meses unos 14 millones de pesos mexicanos.