
Las imágenes son impactantes. Miles de migrantes, la mayoría haitianos, cruzaron Río Grande desde México este fin de semana para llegar a Estados Unidos. Más insólito aún fue la escena de muchos de ellos bajo un puente en el estado de Texas. Hasta el sábado 18 de septiembre se calculaban unas 13.700 personas en el lugar, según Frank Joe Martínez, el alguacil del condado de Val Verde. Organismos estadounidenses parecen buscar desesperadamente cómo solucionarlo. Mientras tanto, la principal encargada del tema migratorio, la vicepresidente Kamala Harris, parece tener otras prioridades.
Harris estuvo el fin de semana dando inicio a un juego de fútbol americano en la Universidad de Howard. Al mismo tiempo, las autoridades fronterizas no se daban abasto con lo que estaba pasando en Texas. Según una reseña de France 24, muchos migrantes lavan su ropa en el río, hay pilas de basura que superan los tres metros y dos mujeres dieron a luz.
No ha habido declaraciones de parte de la vicepresidente desde junio, cuando visitó brevemente la localidad de El Paso y viajó a Guatemala y México, donde prometió trabajar en conjunto por ambos países. Cuando era candidata defendía la llegada de migrantes, pero durante su viaje a estas dos naciones pidió a los solicitantes de refugio no viajar a EE. UU., un cambio de discurso que se suma al mal manejo de la crisis migratoria, criticada desde el Capitolio y desde varios estados, los cuales están pidiendo al presidente Joe Biden una reunión urgente dentro de los próximos 15 días.
⚡️El escándalo del momento.
Los mas de 10 mil #migrantes viviendo debajo de un puente en la frontera de México 🇲🇽 con Texas 🇺🇸, esperando ser procesados. Muchos cruzando ya por río.
Un número importante de ellos son haitianos. pic.twitter.com/xIuOSmjoIl
— Ariel Moutsatsos (@arielmou) September 17, 2021
El campamento de migrantes debajo del puente internacional en Del Río en #Texas, #EstadosUnidos continúa lleno de personas. Algunos construyeron sus propios refugios improvisados con palos y plantas. pic.twitter.com/v0gjXGiocv
— Impacto Mundo (@ImpactoMundo_) September 19, 2021
Haitianos se refugian en EEUU
La Administración Biden tuvo que lanzar advertencias ante la oleada de migrantes haitianos en la frontera, donde también habrían hondureños y venezolanos. “Si viene a Estados Unidos ilegalmente, será devuelto. Su viaje no tendrá éxito y pondrá en peligro su vida y la de su familia”, dijo en rueda de prensa el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, en inglés), Alejandro Mayorkas.
A su juicio, los haitianos “están recibiendo información falsa” que señala que la frontera está abierta o que el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) está disponible. Recordó que el TPS solo se concederá a aquellos que vivían en EE. UU. “antes del 29 de julio” y que pueden recibir ese amparo migratorio si cumplen con ciertos requisitos, reseñó EFE.
Son conocidas las tragedias que atravesó Haití los últimos meses. El magnicidio de su presidente y el terremoto que dejó alrededor de 2100 muertes. Más allá de la “información falsa” que argumentó Mayorkas, está el hecho de que los haitianos, al igual que mexicanos, hondureños, venezolanos, guatemaltecos o salvadoreños ven en EE. UU. una salida más accesible desde que Biden derogó decretos migratorios establecidos por el expresidente Donald Trump.
Ahora las consecuencias son mayores. De por sí, el balance mensual de la Oficina de Protección y Aduanas de EE. UU. (CBP, en inglés) contabilizó 208.887 cruces fronterizos en agosto. Es decir, aumentó 317 % respecto a agosto de 2020. Al revisar el número de expulsiones, vemos que la Administración demócrata sacó del país a 44 % del total de migrantes que cruzaron en agosto. Lo que tanto criticaban ahora se convirtió en la solución más viable.
Deportaciones con el Título 42
La CBP envió a unos 600 agentes a la zona de Del Río para aumentar el ritmo de trámites migratorios. A la par, Mayorkas agregó que la intención del Gobierno de Washington es aumentar la capacidad de los tres vuelos diarios de deportación de haitianos en la frontera con dirección a Puerto Príncipe.
Estos vuelos de deportación están amparados en el Título 42, emitida por la Administración anterior para resguardar la seguridad nacional por la pandemia de COVID-19. Fue una de las medidas que Biden mantuvo y que ahora la están funcionando para desahogar los refugios ya saturados y controlar las oleadas de migrantes que no paran. Pero la medida tiene el tiempo contado, un juez federal ordenó el 16 de septiembre bloquear su uso.
El juez Emmet Sullivan del Tribunal de Distrito del Distrito de Columbia, determinó que por haber pruebas, vacunas y otras medidas de minimización, “la Corte no está convencida de que la transmisión de COVID-19 durante el trámite fronterizo no pueda mitigarse significativamente”. De acuerdo a Daily Mail, la suspensión no entrará en vigencia durante dos semanas, lo que le da a la Administración tiempo suficiente para realizar más de 100 vuelos de deportación. Punto importante, es que la Casa Blance apeló la decisión un día después.
A la espera están 26 gobernadores que enviaron una carta a Biden pidiendo una reunión por una crisis que está afectando a varios estados. Ellos insisten en lo siguiente: “El Gobierno federal no solo ha creado una crisis, ha dejado que nuestros estados se enfrenten a desafíos que solo el Gobierno federal tiene el deber de resolver”.