Sumar jueces a la Corte Suprema no es el único plan del partido demócrata en Estados Unidos. También están en camino reformas de ley para modificar el proceso electoral y sumar más votos a favor. De hecho, una de las iniciativas fue aprobada recientemente en la Cámara de Representantes y va rumbo al Senado.
Todos estos cambios no buscarían otra cosa que “cambiar las reglas para permanecer en el poder”, así lo advirtió el senador Ted Cruz desde la afueras de la Corte Suprema. Paralelo a sus palabras, los demócratas en el Congreso aprobaban la legislación para convertir a Washington, D.C., en el estado número 51. La movida garantizaría al menos tres electores adicionales en las elecciones presidenciales.
“El Partido Demócrata de hoy es tan radical que están perfectamente felices de llenar la Corte Suprema y derribar las instituciones que protegen nuestra Constitución para tratar de imponer su agenda”, dijo en compañía de los senadores republicanos Marsha Blackburn y Lindsey Graham.
El pronunciamiento de Ted Cruz pone sobre la mesa lo que está pasando en las entrañas del Congreso estadounidense. Mientras la opinión pública se centra en otros temas, el caucus está moviendo fichas para cambiar desde adentro la estructura política del país.
Radical Democrats are seeking to:
❌ Destroy the Supreme Court.
❌ Destroy judicial independence.
❌ Destroy the rights protected in the Bill of Rights.
Right now, all of those are hanging in the balance. pic.twitter.com/1RJdSyXIUS
— Senator Ted Cruz (@SenTedCruz) April 22, 2021
El nuevo estado 51
Nancy Pelosi, una de las demócratas más duras de su partido y presidente de la Cámara baja, apareció en una rueda de prensa con un tapaboca negro y rojo con el número “51”. El mensaje quedó claro luego que la Cámara de Representantes aprobara la legislación con 216 votos a favor, frente a 208 en contra.
Esta propuesta recibe el nombre de Ley de Admisión de Washington, D.C. El Distrito de Columbia es actualmente un distrito federal bajo jurisdicción directa del Congreso y no emite votos electorales, allí es donde los demócratas verían la oportunidad. Pelosi califica el hecho como “un paso significativo” para que las personas de D.C. puedan “participar plenamente en nuestra democracia”.
Según el proyecto de ley, el “estado” estaría representado por dos senadores, como todos los demás estados, y un miembro de la Cámara de Representantes. Pero hay críticas. Desde el partido republicano explican que los demócratas buscan la estadidad para obtener beneficios políticos, ya que los residentes del distrito tienden a inclinarse políticamente hacia ese partido. Desde 2000, según el Brookings Institute, el candidato presidencial demócrata ha obtenido más del 89 % de los votos en Washington, D.C, cita el portal USA Today.
Sin embargo, aún no hay mayores éxitos para el caucus. Hay pocas probabilidades de que el Senado apruebe la medida porque se necesitan al menos 10 votos republicanos, sumados a los 50 demócratas. Sin este requisito, el proyecto podría quedar engavetado.
The Democrats’ D.C. statehood scheme is about two things: consolidating power and enacting radical policies.
The American people see right through this blatant power grab.— Kevin McCarthy (@SpeakerMcCarthy) April 22, 2021
Federalizar las elecciones
Poco se ha hablado de este tema. Se trata de la “Ley del Pueblo“, también conocida como HR 1, un proyecto de ley de reforma electoral aprobada a inicios de marzo por los demócratas en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, y SR 1, la versión del Senado que aún no se ha aprobado.
Lo califican como “una de las mayores extralimitaciones gubernamentales en la historia de EE. UU.”, ya que podría traer cambios en el proceso electoral y registro de votantes. Los senadores Tom Cotton y John Boozman, en conjunto con John Thurston, secretario de Estado de Arkansas; citaron algunos posibles peligros de acuerdo con el portal Talk Bussines:
- Permitir el registro de votantes el mismo día, lo que haría imposible que los trabajadores electorales determinaran la elegibilidad.
- Que los estados cuenten los votos emitidos por votantes fuera de su precinto asignado.
- Admitir que se cuenten las boletas que lleguen 10 días después de la elección.
- Que el personal de campaña y los consultores políticos recolecten y entreguen las boletas de voto en ausencia.
“Esta es una medida retrospectiva de que si pensabas que las elecciones en todo el país no fueron buenas en 2020, esto institucionaliza eso”, declaró el French Hill, miembro de la Cámara de Representantes.
Dicha propuesta, al igual que la anterior, necesita los votos del Senado. Sin embargo, los republicanos dudan incluso que alcance los 50 votos demócratas.
Empaquetamiento de la Corte
La Corte Suprema ha sido uno de los primeros objetivos. Ello garantizaría el control de la máxima instancia judicial del país. El objetivo es sumar cuatro jueces más para que el número pase de 9 a 13.
Esto también fue criticado por el senador Ted Cruz durante su rueda de prensa. Inclusive Joe Biden anunció recientemente una comisión para que “analice” varios aspectos del tribunal, entre ellos, los temas sobre los cuales se pronuncia.
El Senado parece tener la última palabra respecto a si se aprueban o no cada uno de estos proyectos. Los próximos días dirán que pasará en Estados Unidos y si realmente los demócratas podrán allanar el camino para permanecer en el poder.