El presidente estadounidense, Donald Trump, autorizó ese lunes el proceso formal de transición presidencial. La declaración surge luego de que la Administración de Servicios Generales (GSA, en inglés) informara al equipo de Joe Biden que la administración Trump está lista para comenzar con el papeleo. No obstante, el líder republicano sigue adelante con su batalla en las cortes para demostrar que se cometió fraude en la elección.
Dicho procedimiento de transición inicia este lunes. La notificación fue hecha a través de una carta emitida por Emily Murphy, administradora de la GSA, quien funge como árbitro para determinar cuándo puede estar disponible el acceso a los fondos gubernamentales para el presidente electo.
NEWS: The GSA has informed president-elect Joe Biden the administration is ready to begin the formal transition process, according to a letter from administrator Emily Murphy sent Monday afternoon and obtained by CNN, via @KristenhCNN (story TK!)
— Jeremy Herb (@jeremyherb) November 23, 2020
Apegada a la ley
Este movimiento se produce después de que Michigan certificara formalmente sus resultados electorales a favor del demócrata, mientras que en Georgia se hizo esto el viernes.
En la carta de Murphy dirigida al equipo de Biden la funcionaria le aclara que: “Sepa que tomé mi decisión de forma independiente, basada en la ley y los hechos disponibles”, escribió Murphy.
“Nunca fui presionada directa o indirectamente por ningún funcionario de la Rama Ejecutiva, incluidos los que trabajan en la Casa Blanca o la GSA, con respecto al fondo o al momento de mi decisión. Para ser claros, no recibí ninguna instrucción para demorar mi determinación”, recalcó posteriormente.
Donald Trump reafirma el pronunciamiento de la GSA
El mandatario estadounidense también se refirió a este hecho a través de su cuenta en Twitter. En ese orden de ideas, Trump agradeció a Murphy por su trabajo y aprovechó el espacio para reafirmar la decisión de iniciar la transición.
“Quiero agradecer a Emily Murphy de la GSA por su firme dedicación y lealtad a nuestro país. Ha sido acosada, amenazada y abusada, y no quiero que esto le suceda a ella, su familia o los empleados de la GSA. Nuestro caso sigue firme, continuaremos la buena batalla y creo que prevaleceremos”, dijo el jefe de Estado en un primer tuit.
Batalla en las cortes sigue firme
A pesar de que este procedimiento ya ha iniciado, el mandatario norteamericano no ha claudicado en sus esfuerzos por demostrar las denuncias de fraude que ha hecho y son reiteradas, así como defendidas, por su equipo legal, que de acuerdo con las propias palabras de Trump, se mantendrá en las cortes.
“Sin embargo, en el mejor interés de nuestro país, recomiendo que Emily y su equipo hagan lo que sea necesario con respecto a los protocolos iniciales, y le he dicho a mi equipo que haga lo mismo”, explicó.
I want to thank Emily Murphy at GSA for her steadfast dedication and loyalty to our Country. She has been harassed, threatened, and abused – and I do not want to see this happen to her, her family, or employees of GSA. Our case STRONGLY continues, we will keep up the good…
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 23, 2020
El equipo legal del presidente Trump emitió el viernes un comunicado en respuesta a la decisión de un juez federal de desestimar la demanda para impugnar los resultados en Pensilvania. El documento firmado por Rudy Giuliani y Jenna Ellis señala que gracias a esa decisión acelerarán los procesos para avanzar con la estrategia de llegar rápido a la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos. De los nueve jueces del máximo tribunal seis son de ideología conservadora o afín al Partido Republicano.
Presiones demócratas
De acuerdo con CNN, Murphy se ha enfrentado a un intenso escrutinio y presión política por parte de los demócratas. A ello también se sumaron algunos republicanos que pidieron el inicio de lo que llamaron “una transición sin problemas”.
En la carta recibida por el equipo de Biden, Murphy también agregó que las reglas de verificación eran vagas y deberían actualizarse. Al respecto, escribió: “La GSA no dicta el resultado de las disputas legales y relata, ni determina si tales procedimientos son razonables o justificados”.
“Estos son temas que la Constitución, las leyes federales y las leyes estatales dejan al proceso de certificación electoral y las decisiones de los tribunales de jurisdicción competente. No creo que una agencia encargada de mejorar las adquisiciones federales y la gestión de la propiedad deba colocarse por encima de la constitucionalidad basado en el proceso de elección. Insto encarecidamente al Congreso a considerar enmiendas a la ley”, aclaró la funcionaria.