Gabriel Fucks, que hasta hace poco oficiaba de embajador argentino en Ecuador, ya está en la capital colombiana. El funcionario “diplomático” kirchnerista tuvo que salir de apuro del país, luego de ser expulsado por el gobierno de Guillermo Lasso. Motivos no faltaron: la corrupta condenada María de los Ángeles Duarte, que estaba asilada en la embajada argentina, escapó a Caracas y todo parece indicar que lo hizo con ayuda del equipo de Fucks y sectores del correísmo.
Aunque todavía no ha dado declaraciones, se sabe que el exembajador, antes de su salida forzosa, habló con Alberto Fernández y con su canciller, Santiago Cafiero. Por ahora, y a contramano de lo que asegura el gobierno de Ecuador, las autoridades argentinas negaron categóricamente haber ayudado a la exministra correísta. Claro que tampoco dijeron como la mujer desapareció de la embajada y del territorio nacional como por arte de magia.
Duarte desempeñó altos cargos durante los años de gobierno de Rafael Correa. Fue ministra de Inclusión Económica y Social y luego se encargó de las carteras de Transporte y Obras Públicas. También estuvo al frente del ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda. Al igual que el expresidente, fue condenada por cohecho y corrupción. Correa está prófugo, pero su exministra se encontraba asilada en la embajada de Argentina, de donde habría escapado con la colaboración de Fucks.
Diego Guelar, que se desempeñó como embajador en China durante el gobierno de Mauricio Macri, indicó que Argentina “tiene que pedir disculpas a la hermana República del Ecuador”. En la opinión del diplomático de carrera, el país le ha prestado colaboración y complicidad “a una delincuente que fue condenada en agosto de 2020”.
“No hay ninguna duda que hubo complicidad. Argentina debería pedir disculpas por la fuga de la exministra ecuatoriana y creo que la próxima administración se va a encargar de normalizar plenamente estas relaciones que son importantes en el marco sudamericano”, señaló el especialista en relaciones internacionales.
Ni bien Fucks era declarado “persona no grata” y se tramitaba su expulsión, Alberto Fernández se comunicó personalmente con el canciller Juan Carlos Holguín, para poner paños fríos y frenar la situación. Sin embargo, el gobierno ecuatoriano se mostró inflexible y terminó echando del país a Fucks, que por estas horas se encuentra arribando a Bogotá. Con el hecho consumado, la cancillería argentina aplicó la misma medida y echó al embajador ecuatoriano, que ya dejó la sede diplomática de Buenos Aires.