La vida tiene muchas vueltas y vaya que Johnny Depp lo sabe. Las acusaciones de su exesposa Amber Heard, que comenzaron con un artículo periodístico y terminaron en la justicia de Estados Unidos, amenazaban la carrera y el futuro del actor. En ese momento, cuando todo era incierto, Disney prefirió dejar de lado el principio básico de que todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario y canceló las producciones que tenía en carpeta con el actor. Convencido de su inocencia, la estrella de Piratas del Caribe dijo que no perdonaría jamás a la empresa y que no volvería a interpretar a Jack Sparrow ni por 200 millones de dólares.
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En el juicio, el representante de Depp aseguró que Disney ya estaba trabajando en una nueva secuela de la película, pero que la producción había quedado suspendida, ya que no querían estar vinculados al actor. Además, aseguró que desde que fue publicado el artículo de Heard, le resultó “imposible” conseguirle un papel en la industria cinematográfica. Pero, como vimos, la justicia lo declaró inocente y la que se encuentra en problemas hoy es la actriz, que tiene que reunir los fondos para pagar los daños que generaron su falsa acusación.
Desde hace varios meses trascendió que Disney le pidió disculpas al actor y que buscaba ofrecerle un jugoso contrato que dejara atrás lo sucedido. Sin embargo, lo único que se sabía eran estos acercamientos infructuosos, pero que tenían una cifra: 310 millones de dólares. Las declaraciones de Depp sobre que no habría vuelta atrás ni por 200 millones sirvieron eventualmente de piso para lo que terminaron siendo las futuras negociaciones.
Ahora, la prensa británica asegura que ya hubo acuerdo y que la producción de la nueva entrega de Piratas del Caribe ya está en marcha. Según estos primeros trascendidos, la preproducción ya comenzó y Disney estaría trabajando en los detalles finales, pero con Depp ya confirmado y comprometido con el largometraje. El nombre de la nueva entrega, que se estaría trabajando en total secreto, sería “Un día en el mar”. Los fans, emocionados.