Bajo el mando del Partido Demócrata, hoy Estados Unidos lleva la bandera arcoiris a todas sus instituciones, incluso la que está a cargo de la alimentación. Dicha táctica de la Administración Biden surge con motivo del mes del orgullo LGBTQ+ (el signo mas alude a las letras que se siguen incorporando en el abanico de la “diversidad sexual”). Sin embargo, estas prácticas que a simple vista se notan “inclusivas”, tienen matices que pueden perjudicar a facciones que no comulguen con esta matriz de opinión.
- Lea también: 1984 de George Orwell: cómo malinterpretar un clásico
- Lea también: Crecí en un sistema comunista. Esto es lo que en EEUU no entienden sobre la libertad
Un claro ejemplo surge en en la figura del secretario a cargo del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), Tom Vilsack, quien anunció su respaldo público y el hecho que la bandera LGBT aparecerá afuera de su oficina como apoyo. Ya en su perfil de Twitter aparece bordeado por el logo. De acuerdo con la página oficial de la intitución, el compromiso con la agenda LGBTQ+ incluye la “seguridad alimentaria”, pero podría excluir a quienes no la adoptan.
A principios del mes de mayo, el Departamento de Agricultura indicó que para que las escuelas reciban fondos para los almuerzos, desayunos y otros alimentos de los estudiantes, deben cumplir con su interpretación de la prohibición de discriminación basada en el sexo en el Título IX de las Enmiendas Educativas de 1972 y otros programas relacionados con la alimentación, que incluye la orientación sexual y la identidad de género.
“USDA se compromete a administrar todos sus programas con equidad y justicia, y a servir a los necesitados con la mayor dignidad”, dijo Vilsack en su oportunidad, a través de un comunicado de prensa. “Un paso clave para promover estos principios es erradicar la discriminación en cualquier forma, incluida la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género”.
“Al mismo tiempo, debemos reconocer la vulnerabilidad de las comunidades LGBTQI+ y brindarles una vía para afligir cualquier discriminación que enfrenten”, continuó el secretario. “Esperamos que si nos mantenemos firmes contra estas desigualdades, ayudaremos a generar un cambio muy necesario”, agrega.
Ese cambio incluye la promoción de la ideología de género en el sistema escolar.
This Pride Month, we reaffirm our commitment to standing in solidarity with LGBTQ+ Americans. Pride is a jubilant communal celebration of visibility and personal celebration of self-worth and dignity. We’re proud to raise the Pride flag outside @USDA in support.
— Secretary Tom Vilsack (@SecVilsack) June 1, 2022
Dentro del mismo comunicado, la subsecretaria adjunta de Alimentos, Nutrición y Servicios al Consumidor, Stacy Dean, declara: “Ya sea que esté comprando comestibles, haciendo fila en la cafetería de la escuela o recogiendo alimentos de un banco de alimentos, debería poder hacerlo sin temor a la discriminación (…) A nadie se le debe negar el acceso a alimentos nutritivos simplemente por quiénes son o cómo se identifican”.
Esto último es crucial para entender la extensión de la medida. En nombre de la no discriminación, se exigirá a las escuelas ideologizarse para permitir el acceso a comida de los estudiantes. Por ello el director ejecutivo de la Asociación de Educación No Pública de Indiana, John Elcesser, a The Federalist. Acusa a la administración de Biden de “jugar a la política alimentando a los niños pobres”.
Consecuencias para los niños en EEUU
Alrededor de 30 millones de niños, que rondan el 10 % de la población de los EE.UU., son beneficiarios del Programa Nacional de Almuerzo Escolar. Esto durante periodo escolar regular. Durante el periodo de confinamiento por causa del coronavirus, el programa siguió alimentando a 22,6 millones de niños todos los días.
Bajo la nueva regla, para recibir esta comida, la administración Biden está obligando a las escuelas a integrar los baños y vestidores, de manera que no estén diferenciados por sexo, lo mismo las áreas para dormir, y obliga a los maestros a modificar el uso de pronombres para los niños que alegan ser transgénero.
“Si una escuela siente que no puede participar porque está en conflicto con su misión o valores, si no se otorga una exención religiosa, se le está quitando un programa que alimenta a niños de bajos ingresos”, advirtió Elcesser.
Aunque annucia que algunas instituciones religiosas podrían ser elegibles para una exención, advierte que ninguna escuela del gobierno podrá solicitar la exención de la regla. De manera que los padres de familia y los distritos escolares individuales deberán luchar contra la regla en los tribunales.
Holding poor kids like I was hostage. Hungry for the decisions their school districts make. To make it so boys in skirts can enter the girls'bathrooms everywhere this is widespread, girls hold it all day. They're already ashamed of periods. They don't want to pee next to boys.
— Solveig283 (@solveig283) May 28, 2022
Se puede observar los comentarios desfavorables en redes sociales, donde incontables personas reprochan esta medida. Señalan la incomodidad que produce a las niñas compartir el baño con niños que usan falda, cómo muchas niñas se aguantan las ganas de ir al baño por negarse a compartir el espacio con varones y sobre todo el malestar que les genera durante su ciclo menstrual.
De la misma forma, llamaron “rehenes” a los niños a merced de esta medida y cómo el gobierno aprovecha el hambre de los más necesitados para avanzar una agenda ideológica.