El gobierno argentino anunció que se hará cargo de costear los derechos por la transmisión de los 64 partidos del Mundial de Fútbol Brasil 2014. 32 del total de 64 serán transmitidos en directo –el partido inaugural, los partidos de las selecciones más importantes y los partidos en las fases finales– mientras que la otra mitad se transmitirán diferidos.
El anuncio se hizo este martes en la presentación de la programación del Mundial —que comenzará en 28 días— en una conferencia de prensa transmitida en vivo por la Televisión Pública con la presencia del Jorge Capitanich, jefe de Gabinete de ministros, Julio Grondona, presidente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) y Alejandro Sabella, director técnico de la selección argentina. Los costos de los derechos de transmisión, la difusión de la lista de jugadores convocados a la selección y viejos fantasmas en torno al polémico programa del gobierno Fútbol para Todos (FpT) pusieron a este deporte en el centro de los comentarios mediáticos.
“La transmisión del Mundial es una decisión política de la presidente Cristina Fernández de Kirchner para que todos los partidos lleguen a cada rincón del país”, explicó Capitanich.
Según un análisis del diario El Cronista, el Estado argentino desembolsó US$18 millones a la empresa Torneos y Competencias por los derechos exclusivos. Esta cifra obedece a los costos operativos, técnicos, tecnológicos y logísticos de las transmisiones. Si alguna otra emisora quiere transmitir los partidos deberá comprar la programación a la administración de Fútbol para Todos (FpT).
Esta decisión de transmitir los partidos del Mundial en directo y de forma libre y gratuita para la población se enmarca dentro de FpT, una iniciativa llevada a cabo por el Gobierno de Cristina Kirchner desde el 2009 con la que el estado argentino compró los derechos para transmitir por televisión abierta y en vivo los partidos de primera, segunda y tercera división de los torneos locales de fútbol.
Antes de agosto de 2009 estos partidos podían ser vistos solo a través del sistema de televisión codificada (el pay-per-view). La decisión fue anunciada por cadena nacional por la presidente de la nación quien declaró: “Yo no quiero una sociedad de secuestros, ni de secuestros de personas, ni de imágenes, ni de goles. El 50% de las ganancias va a ser destinado a la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) y el resto, a promocionar el deporte olímpico”. Comentario que le valió numerosas críticas por comparar el secuestro de personas durante la dictadura militar con un eventual “secuestro” de los partidos de fútbol por parte de la televisión paga.
Pero desde 2009 el programa FpT no solo no ha traído las ganancias esperadas sino que incurre en grandes pérdidas. La Jefatura de Gabinete había contemplado en el presupuesto 2014 un gasto de AR$1410 millones (unos US$1.700.000) solo en derechos de transmisión, sin contemplar los gastos de producción, logística, publicidad y televisión.
Desde que el programa arrancó, el gasto ha aumentado en 135%. A los gastos mencionados habría que sumarle el costo de la publicidad oficial que se transmite durante todos los partidos, unos US$90 millones. La pauta oficial es la única que puede transmitirse, pues en 2010 se prohibió la participación de la publicidad privada a petición del ex presidente Nestor Kirchner, a pesar de que en ese momento no ejercía ningún cargo formal en el gobierno.
Aníbal Fernandez, en su momento Jefe de Gabinete, explicó la razón por la cual prohibieron la publicidad privada: “Cuando hicimos el cálculo, el total que nos significa [la publicidad privada] era una cifra irrisoria, y no tenía sentido que estuviéramos dando la mitad de los segundos disponibles para publicidad por una cantidad irrisoria”.
Fútbol para todos: ¿Sí o no?
El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, dejó claro hace un año su oposición al programa FpT. “En su momento, el fútbol se organizaba muy bien sin la intervención y la manipulación del gobierno nacional”, había advertido el jefe del ejecutivo de la ciudad de Buenos Aires.
Además, el jefe de su bloque en la Cámara baja, Federico Pinedo, a través de la presentación de un proyecto de ley, propuso la regulación de la pauta oficial durante la transmisión de los partidos.
“El Programa Fútbol para Todos, que se suponía debía cumplir con el objeto de difundir los partidos en TV abierta, terminó siendo un mecanismo de difusión de propaganda política del oficialismo de turno y de ataque a quienes tuvieran opiniones diferentes de las del Poder Ejecutivo”, expresó Pinedo al presentar el proyecto.
A raíz de las declaraciones de Macri, el responsable del programa de FpT, Abal Medina, manifestó que “es bueno que aclare sus intenciones, su visión de país, que es el de una Argentina para pocos”.
Otro oficialista que salió en defensa de la gratuidad del programa fue el gobernador de la provincia argentina de Entre Ríos, que rechazó de lleno las acusaciones a esta iniciativa.
“Los que lo critican al programa Fútbol para Todos [en referencia al Grupo Clarín] son los que defienden un negocio que, durante años, hicieron unos pocos monopolizando el deporte más popular de Argentina, arrebatando y usufructuando el patrimonio de todos”, expresó el político.
En esta sentido, el periodista Victor Hugo Morales manifestó que “Fútbol para Todos es una bendición (…) Antes, todos los que vivimos en Argentina teníamos que ser rehenes de los partidos codificados, y la gente tenía que pagar muchísimo más que ahora para ver el fútbol. Sólo el 10% de la población podía ver los partidos y hoy es un beneficio del que gozan todos aquellos que viven en el país”.