El caso del testaferro de Nicolás Maduro, Alex Saab, se complica aún más; ahora la Fiscalía de Cabo Verde imputó a dos supuestos emisarios del país africano que viajaron a Venezuela para negociar con el régimen.
En un comunicado la Procuraduría General de la República (PGR) informó que abrió una causa contra el empresario Fernando Gil Évora y contra Carlos Dos Anjos, exdirector de Turismo y Transporte; pues habrían cometido el delito de usurpación de autoridad.
De acuerdo con la Procuraduría debe abrirse una investigación judicial por la “existencia de hechos susceptibles de integrar la práctica de un delito de usurpación de autoridad”.
Gil Évora y Dos Anjos deberán responder ante los tribunales del archipiélago, y de no convencer podrían enfrentar penas de uno a cinco años de prisión. Ambos viajaron al país suramericano en nombre del Gobierno de Cabo Verde sin contar con algún cargo oficial.
Los caboverdianos viajaron a Venezuela para reunirse con el régimen de Maduro; ellos aseguran que se trató de un supuesto viaje con fin “comercial”; sin embargo el verdadero fin sería presuntamente negociar la posibilidad de liberar al testaferro de Maduro.
Cabo Verde afirmó que no envió a ningún emisario a Venezuela y tras enterarse del viaje de Gil Évora, decidió prescindir de sus servicios como presidente del consejo de administración de EMPROFAC, compañía estatal de distribución de medicamentos en el país africano.
Évora además es hermano de una juez caboverdiana de más de 26 años de trayectoria llamada María Teresa Alves Évora, quien ostentó el cargo de presidente del Consejo Superior de Magistratura Judicial de Cabo Verde. Lo que indicaría que el viaje habría sido para aceptar algún soborno por parte de la tiranía.
El pasado miércoles 19 de agosto se conoció que Estados Unidos incautó un cargamento de armas en un avión venezolano. Al parecer dicho arsenal estaría relacionado con planes del régimen de Maduro para lograr la fuga de Saab en Cabo Verde antes de ser extraditado a suelo norteamericano.
De acuerdo con el diario El Nuevo Herald, el exdirector de Turismo y Transporte de Cabo Verde, Oliveira Gomes Dos Anjos, y el empresario farmacéutico Alves Évora se reunieron en secreto con Maduro: «llegaron secretamente a Venezuela el lunes y pasaron la noche en el palacio presidencial de Miraflores en medio de los esfuerzos del gobernante Nicolás Maduro por conseguir que el país africano libere a su principal socio, el colombiano Alex Saab, acusado de ser el testaferro y el arquitecto de las operaciones criminales del dictador venezolano».
Una fuente le dijo al PanAm Post que el dueño del avión es Gregori Méndez, uno de los dos pilotos detenidos en Fort Lauderdale, que recibió el activo por parte de Saab en un traspaso.
La evidente vinculación de Saab con el avión incautado en Florida y con los dos caboverdianos que se reunieron con Maduro, y el hecho de que ambas partes hubieran coincidido en San Vicente y las Granadinas, despierta varias inquietudes. Una de ellas: ¿para qué eran las armas?, y la otra, ¿existió el intento de Maduro de planificar un rescate de Saab?
Maduro estaría desesperado por liberar a su principal testaferro, pues Saab no es un simple lavador de dinero. De acuerdo con las investigaciones, es una pieza clave en la logística de los negocios sucios de la tiranía en Venezuela.