Estados Unidos se prepara para tomar medidas y evitar que Venezuela y el Gobierno del presidente (e) Juan Guaidó pierdan Citgo, el principal activo del país suramericano en el exterior.
El próximo 28 de octubre es la fecha límite para pagar 914 millones de dólares entre capital e intereses a los tenedores del bono PDVSA 2020. De no hacerlo, y de no existir una medida por parte de Estados Unidos, los acreedores podrían tomar el control de la petrolera.
De acuerdo con la agencia de noticias Bloomberg, Donald Trump busca proteger Citgo ante el riesgo de que los acreedores se apropien de las acciones. Para ello acudirá a la intervención del Departamento del Tesoro.
Bloomberg reporta que el gobierno de #EEUU prepara medidas que impedirían que tenedores del bono @PDVSA 2020 puedan ejecutar el colateral sobre el 50.1% de las acciones de #CITGO cuando se verifique el default. Las medidas serían anunciadas este viernes. Muy importante noticia.
— Mariano de Alba (@marianodealba) October 23, 2019
Citgo es una empresa con cuatro mil novecientas estaciones de gasolina y una red de tres refinerías ubicadas en Luisiana, Illinois y Texas. La compañía refina setecientos cuarenta y nueve mil barriles de crudo diarios.
“Los funcionarios estadounidenses están discutiendo un último movimiento que evitaría que los tenedores de los bonos 2020 de Petróleos de Venezuela, respaldados por el 50,1 % de las acciones de Citgo Holding Inc., confisquen la garantía si hay un incumplimiento. Se debe tomar una decisión en los próximos días, ya que el reloj marca el pago de $ 913 millones de PDVSA que vence el 28 de octubre”, señala Bloomberg.
Tal y como lo asevera la agencia de noticias, perder Citgo podría convertirse en un “desastre político” para Guaidó, debido a que el régimen de Nicolás Maduro, a pesar de ser el culpable de las millonarias deudas, podría responsabilizar a Trump y al Gobierno interino por la pérdida del mayor activo venezolano.
Lo que analiza el Gobierno estadounidense es la posibilidad de que el Departamento del Tesoro derogue la Licencia 5, que les permite a los tenedores del PDVSA 2020 tomar el control de Citgo ante un default. Con esto, el Tesoro podría proteger a la compañía. Esto significa que la garantía no tendría ningún valor mientras las sanciones estén vigentes.
“Los funcionarios en Washington están reconociendo la creciente probabilidad de que la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro revoque la Licencia General 5, poniendo efectivamente las transacciones relacionadas con los bonos PDVSA 2020 en pie de igualdad con otros negocios financieros venezolanos que están prohibidos”, explica Bloomberg.
Lo más importante a resaltar es que hasta el 2018 Citgo estuvo en manos de los regímenes de Hugo Chávez y Maduro. Sobre ellos recae la responsabilidad de que Venezuela pueda perder esta compañía, pues irresponsablemente hipotecaron al país y dieron en garantía su mayor activo.
Luego de que el presidente Guaidó asumiera el cargo, Estados Unidos lo ayudó a tomar el control de la refinería. Sin embargo, la empresa ya tenía millones de dólares en deudas y casos abiertos en tribunales por parte de acreedores o empresas víctimas de las expropiaciones encabezadas por Chávez. Cuando la oposición asumió el poder de Citgo, Venezuela ya corría el riesgo de perderla.
En mayo de este año el equipo de Guaidó realizó un pago de intereses por setenta y un millones de dólares de bonos 2020, lo que llamó un “pago bajo protesta”. El 15 de octubre, la Asamblea Nacional, liderada por la oposición, aprobó un acuerdo que califica las notas de inconstitucionales porque no fueron aprobadas por la legislatura. Los acreedores argumentan que el pago anterior legitimaba la deuda.
Sin Citgo, Venezuela perdería la capacidad de distribuir crudo venezolano en Estados Unidos. Sin embargo, tras las sanciones emitidas por el Gobierno Trump contra la tiranía, ese país ha reducido sus compras a Venezuela.
Conocer cuánto vale Citgo es una discusión constante entre los economistas, pero, según estimaciones, si Venezuela hoy decidiera venderla para pagar sus deudas, no recibiría más de cuatro mil millones de dólares, de los cuales la mitad es de Rosneft y la otra mitad para pagar todas las deudas pendientes.