English Una investigación divulgada este martes 24 de marzo por la Fundación Mil Hojas de Ecuador reveló uno de los supuestos Troll Center de la Revolución Ciudadana del gobierno de Ecuador; se trata de una oficina dedicada a monitorear y sabotear en internet a los usuarios opositores al gobierno y los mensajes que estos emiten.
El reporte revela imágenes no publicadas de Ribeney SA, un despacho localizado en un distrito exclusivo de Quito, decorado con fotografías e imágenes del presidente Rafael Correa y el Che Guevara. De acuerdo a Mil Hojas, los empleados de Ribeney, operan varias cuentas dedicadas a monitorear y atacar a la oposición ecuatoriana.
Conforme a la Superintendencia de Compañías de Quito, Ribeney tiene dos accionistas: Carlos Venegas Quiñonez y su hijo, Carlos Venegas Chamorro. La empresa comenzó a operar en agosto de 2013, con un presupuesto inicial menor a US$1.000.
Jairo Vera Lino se encuentra listado como el gerente general del negocio. De acuerdo a la información suministrada por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), parte de la experiencia de trabajo previa de Vera, fue como trabajador agrícola en la provincia de Manabí.
En noviembre de 2013, la compañía firmó un contrato de 90 días, , con el Ministerio de Sectores Estratégicos por el valor de $200.000 para planificar una campaña mediática para “fortalecer la exploración petrolera en el país”.
La dirección de la sede de Ribeney en Quito cuadra con la dirección registrada por otra compañía, Medaglia SA, de la cual Venegas Chamorro también es accionista.
De acuerdo con la Superintendencia de Compañías, Medeglia SA fue conformada en enero de 2011, e inicialmente fue registrada con la misma dirección de otras dos agencias de publicidad vinculadas al gobierno, Percrea y Ximah Digital.
Percrea es gerenciada por Carlos Alvarado, hermano de dos altos funcionarios del gobierno: Fernando y Vinicio Alvarado. Además, Mil Hojas reporta que exempleados de Percrea fueron los que inicialmente formaron Ximah.
Duro trabajo de lo #Mashitrolls, así se crean tendencias en #Ecuador http://t.co/SmKfya17XU pic.twitter.com/hTygPNhEJr
— Fundación Mil Hojas (@fmilhojas) March 25, 2015
Mil Hojas alega que Medaglia mantiene contratos millonarios con el gobierno ecuatoriano. El gobierno otorgó a la compañía siete de esos contratos entre 2013 y 2014, incluyendo un “contrato de estrategia ciudadana” por el valor de $270.000, y uno por una campaña sobre la concientización del trabajo infantil de unos $160.000.
PanAm Post contactó a la Fundación Mil Hojas para comentar sobre la historia, pero la solicitud no fue respondida inmediatamente. El gobierno ecuatoriano aún no ha respondido sobre estas acusaciones.
Correa y los Trolls, un contexto
Las acusaciones de que el gobierno patrocina operaciones de trolls (como se denomina a estos saboteadores) en las redes sociales de Ecuador no son nuevas. En 2012, Fernando Balda, un excongresista, aliado del partido gobernante, y hoy, uno de los críticos más acérrimos de Correa, reveló en su blog que una vez ofreció una recompensa por información sobre corrupción dentro del gobierno ecuatoriano. Como resultado, un usuario anónimo respondió a Balda con una lista de cuentas en las redes sociales creadas exclusivamente para defender al presidente Correa de sus críticos y de los periodistas.
En septiembre del año pasado, el escándalo de “Twitter gate” se intensificó cuando un supuesto hacker publicó un video en Youtube revelando a Juan Carlos Váscones, director general de Ximah Digital, como uno de los administradores de la página de Facebook El Patriota, un importante troll del oficialismo.
Más tarde, Váscones admitió que su compañía creó la página de Facebook El Patriota, pero negó estar involucrado en la creación de las cuentas de Twitter. El problema se agravó cuando reportes confirmaron a Váscones como representante de Ecuador en IMSCorp, un socio comercial de Twitter en Latinoamérica.
En enero de 2015, el presidente Correa impulsó Somos +, un sitio web creado con el propósito de responder a los usuarios de las redes sociales que “difaman” al gobierno.