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Una serie de incidentes se registran en la comunidad de Concepción, provincia de Tucumán, en Argentina, donde alrededor de unos 500 manifestantes se encuentran atrincherados las afueras de la municipalidad para reclamar por haber sido cesados en sus funciones. Antes de dejar su cargo, el gobernador kirchnerista Osvaldo Morelli, los contrató, y recientemente fueron despedidos por el nuevo gobernador, perteneciente al partido político Cambiemos, Roberto Sánchez.
Las protestas estallaron en la madrugada de este martes, cuando los manifestantes prendieron fuego a neumáticos alrededor de la casa municipal, impidiendo la salida de los funcionarios que se encuentran todavía dentro del edificio.
Roberto Sánchez asumió el jueves 29 de octubre; en los últimos días analizó el pase a nómina de más de 400 personas y derogó los decretos que había utilizado Morelli para contratarlas. Además, los incidentes también se reprodujeron en la casa del nuevo gobernador, cuando un grupo de personas intentaron atacar su propiedad.
Sánchez denunció a los medios que unos 100 manifestantes «impiden que abandone el edificio» y que «se escuchan disparos de armas de fuego», fuera del edificio municipal. «Tengo la municipalidad sitiada por el fuego», agregó.
[adrotate group=»7″]Acerca de los despidos, el nuevo gobernador comentó que «algunos trabajaban como contratados y otros fueron netamente punteros (así se llama a los simpatizantes del peronismo que acarrean votantes los días de elecciones). Trabajaban un día y cobraban todo el mes. Nosotros propusimos que sólo le renovaremos a los que realmente trabajaban, pero están muy intransigentes».
Sánchez culpó de los incidentes a «una barra brava mandada por el exintendente Morelli, dirigida por él», también expresó que en los últimos años los trabajadores municipales llegaron a ser alrededor de mil personas.
El gobernador recibió amenazas hace dos semanas y en su momento denunció ataques de bombas molotov contra su propiedad.
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