
Ingrid Betancourt, la excandidata presidencial y exsenadora colombiana que estuvo secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por más de 5 años, volvió al país suramericano tras una larga ausencia para apoyar el proceso de paz entre el gobierno del Presidente Juan Manuel Santos y las FARC.
“Cuando salí de la selva hace 8 años, la Colombia a la cual volví era una Colombia donde hablar de perdón era sinónimo de derrota o entreguismo. Pensar en diálogo con la guerrilla era traicionar a la patria”, dijo Betancourt durante un emotivo discurso que ofreció en el foro La reconciliación, más que realismo mágico, organizada por Martín Santos, hijo del presidente.
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“En el proceso de confiar y ser confiable no debemos tener miedo a la equivocación. Es un riesgo que tomamos, claro. Pero es mejor que la certeza nacional de que exterminarnos es la única solución”, aseguró Betancourt haciendo referencia al proceso de paz que apoya totalmente.
“Tengo el convencimiento que la sinergia de lo colectivo, hará que nuestra decisión de confiar genere más confiabilidad, y que esa virtud de ser confiables, pueda ser transmitida a las futuras generaciones”, indicó la antigua rehén de las FARC.
Además, Betancourt habló de lo que padeció durante su cautiverio bajo las FARC, haciendo analogía al realismo mágico del que se trataba el foro.
Con respecto al proceso de paz, Betancourt afirmó que “la negociación con las FARC ha tenido como efecto el producir un cambio positivo de lenguaje. En la mesa de La Habana, declaraciones altisonantes producto de la confianza le cedieron el paso a expresiones prudentes y más constructivas”.
A pesar de haber sido liberada por la administración de Álvaro Uribe en una operación que fue alabada desde el ámbito internacional, Ingrid Betancourt ha reiterado que el camino con las FARC es el diálogo desde el 2 de julio de 2008.
Esta posición contrasta con la de Uribe, quien ha sido un férreo oponente al proceso de paz liderado por Juan Manuel Santos.
Presencia de Ingrid Betancourt genera protestas
Mientras Betancourt participaba en el foro, varias manifestaciones se llevaron a cabo a las afueras del evento.
Los manifestantes critican la postura de Betancourt frente al procesos de paz y aseguran que, aunque a Ingrid “la afectó directamente la violencia del terrorismo, ahora, por una serie de conveniencias, quiere cambiar todo su papel después de que ella demandó al Estado”.
Un manifestante aseguró al portal El Colombiano que protesta en contra de “la impunidad que trae el proceso de paz”. Ya que eso no va “con todas las cosas que se han firmado en el derecho internacional”.
Fuente: El País, El Colombiano