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Luis Rubiales, ya no ocupa la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Con un comunicado, informó que renunció a ese cargo y a la vicepresidencia de la UEFA luego de la “veloz suspensión” de la FIFA debido al escándalo que se desató en relación con el beso que le dio a la jugadora de fútbol, Jenni Hermoso.
“Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir en nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”, se lee en el texto. Así, termina una etapa para el otrora representante de la federación española. Pero su decisión no solo se debe al escrutinio público, también a que la fiscalía española presentó una denuncia en su contra por agresión sexual y coacción por besar en los labios a Hermoso.
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El tema no es menos que polémico y ha servido para poner cuestionamientos y distintos argumentos sobre la mesa. Lo cierto, es que lo que debió ser una celebración por el triunfo de la selección en el mundial femenino organizado por la FIFA, se vio opacado por un acto del cual se dijo inicialmente que no fue consensuado. Luego salieron a la luz imágenes de la jugadora luego del partido que supuestamente sugerían que sí había dado permiso a Rubiales para hacerlo. En medio de idas y vueltas, hubo pronunciamientos inclusive de la selección masculina y hasta de voces dentro de la política española y del movimiento progresista.
Próximas elecciones en la Federación
Fueron cinco años al frente de la Real Federación Española de Fútbol que terminaron por el beso y porque Rubiales ya venía de agarrarse su zona íntima para celebrar durante el partido mientras que a su lado estaban la reina Letizia y su hija de 16 años, Sofía.
En general, Rubiales entrega su renuncia marcado por estas y muchas otras polémicas, como la orgía que reveló su tío, Juan Rubiales, con “ocho a diez mujeres” en un chalet ubicado en Salobreña y disfrazado de reunión de trabajo, usando dinero de la Federación. No era precisamente un funcionario ejemplar y eso determinó mucho de lo que ahora se desató tras el beso a Hermoso.
El camino a partir de ahora, será la convocatoria a elecciones para elegir un nuevo presidente de la RFEF hasta que termine el período que Rubiales tenía asignado hasta 2024. En paralelo, la FIFA y el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) tienen abiertos expedientes contra Rubiales. Este último por “posible falta grave por su comportamiento en el palco durante la final del Mundial femenino”.
