“Dime de qué presumes y te diré de qué careces”, así reza el famoso dicho que cala a la perfección con el uso de unos 400 aviones fletados de parte de líderes mundiales para viajar hacia la cumbre del clima COP26 en Glasgow, Escocia. Aseguran que el mundo está al borde del colapso climático, pero del otro lado usan aeronaves a base de combustibles fósiles.
Le llaman “hipocresía verde”. Restricciones para los ciudadanos que sus mandatarios no están dispuestos a cumplir. Jeff Bezos, fundador de Amazon, encabezó el desfile con su avión de 48 millones de libras (más de 65 millones de dólares). Otro fue el príncipe Alberto de Mónaco, además de mandatarios, directores ejecutivos “ecológicos”, y miembros de la realeza. Se estima que la contaminación llegó a 13.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2), equivalente a la misma cantidad de CO2 que emiten más de 1600 británicos por año.
Este tipo de hipocresía no es nueva. Por años estas figuras se han vanagloriado como defensoras del ambiente, pero están lejos de cumplir objetivos que ellos mismos suscribieron. Así lo dejó saber la ONU en su informe anual sobre la brecha de emisiones. Especialmente los países del G20 están lejos de alcanzarlos.
El fundador de Amazon llegó a la cumbre climática después de celebrar el 66 cumpleaños del fundador de Microsoft, Bill Gates, en un yate frente a la costa de Turquía. Otro un evento que generó nuevos reclamos de hipocresía verde. Según el reporte de Daily Mail, llegó a dicho barco en helicóptero.
Jeff Bezos's £48m Gulf Stream leads parade of 400 private jets into COP26 https://t.co/rulDYWGIu7 pic.twitter.com/i5By6tlF7R
— Daily Mail U.K. (@DailyMailUK) November 1, 2021
¿Por qué no hicieron videoconferencia?
La videoconferencia pudo haber sido una alternativa altamente ecológica para la cumbre climática, tal como viene ocurriendo con otras reuniones de alto perfil debido a la pandemia. Pero es evidente que no fue considerada. “No tiene sentido que todos estos aviones adicionales aterricen en Escocia. Solo están agravando el problema al volar todos estos aviones, cuando es bastante fácil quedarse en casa y charlar”, sostuvo un empleado del aeropuerto de Glasgow.
Matt Finch, del grupo Transporte y Medio Ambiente explicó a Daily Record la gravedad de los vuelos.
“Para ponerlo en contexto, la huella de carbono total de un ciudadano común, incluidos todos los lugares a los que viaja y todo lo que consume, es de alrededor de ocho toneladas al año. Por lo tanto, un ejecutivo o político que tome un vuelo privado de larga distancia quemará más CO2 que muchas personas normales en un año””.
Al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no le bastó con quedarse dormido en plena conferencia. Sino que días antes por su visita al Vaticano para reunirse con el papa Francisco, usó 85 vehículos a base de combustible.
Por su parte, Boris Johnson admitió que volaría a Londres desde la cumbre climática en lugar de viajar en tren. Horas antes declaraba que la cumbre “puede y debe marcar el comienzo del fin de la catástrofe del cambio climático”.
This should have been a Zoom call.#COP26 pic.twitter.com/HFnV5i7qEK
— Timothy Allen (@MrTimothyAllen) November 2, 2021
85 gas guzzling vehicles.
Flown there for no purpose. Just a vanity visit.
Very green.https://t.co/c7JwBhUMnt via @nypost
— Steve Milloy (@JunkScience) October 30, 2021
¿Acuerdos útiles?
Los aviones también llegaron a Glasgow desde Ucrania, Pakistán, Armenia, Corea del Sur, Australia, India, Ruanda y Angola, ninguno de los cuales suele tener vuelos programados al aeropuerto. La cumbre se celebrará hasta el 12 de noviembre por lo que aún quedan días para firmar acuerdos.
Hasta ahora, un centenar de países firmaron un tratado para revertir la destrucción de bosques, que representan el 85 % de la masa forestal del planeta. Boris Johnson mencionó que 90 % de la economía mundial ya avanza “en dirección” a lograr las cero emisiones netas de carbono.
En este sentido, la India se comprometió a que la mitad de su energía provenga de fuentes renovables en 2030 y a reducir las emisiones de carbono en 1.000 millones de toneladas durante esta década, replicó EFE. Pero del dicho al hecho hay un largo trecho, que lo digan todos estos “líderes” respecto a sus acciones.