Ayer se llevó a cabo la primera vuelta presidencial en Colombia, y tal como lo mostraron las encuestas, los colombianos deberán asistir por segunda vez a las urnas, el 17 de junio, para elegir entre Iván Duque y Gustavo Petro.
Sin embargo, Duque y Petro no fueron los únicos ganadores de la jornada electoral. La Registraduría, Sergio Fajardo (Coalición Colombia), Álvaro Uribe y las encuestadoras también se vieron beneficiadas por los resultados.
A continuación, en el PanAm Post hacemos un análisis de cada uno de ellos.
Duque, el gran ganador de la jornada
Con 7.569.693 apoyos Duque se consolidó como el gran ganador de la jornada electoral. No solamente por ocupar el primer lugar, sino porque ningún candidato en la historia de Colombia había recibido un apoyo tan masivo en primera vuelta. Esto le podría garantizar que en segunda sea uno de los candidatos más votados, superando a Juan Manuel Santos, quien en 2010 obtuvo 9.028.943 votos.
Pese a las críticas que le hicieron por haber recibido el apoyo de Viviane Morales, la coalición de iglesias, Alejandro Ordóñez, entre otros, estas dieron resultado. Sus cálculos políticos fueron acertados, y si su tendencia se mantiene para en la próxima vuelta, podrá alcanzar fácilmente la presidencia.
La votación también le permitió a Duque consolidarse dentro del Centro Democrático (CD), pues aunque su candidatura no le gustó al ala más dura de los uribistas, quienes esperaban que el expresidente señalara como candidato a Rafael Nieto, ahora tendrán que aceptar que Duque y Uribe tendrán el control sobre el CD.
Este triunfo, y el posible en segunda vuelta, le da al candidato uribista la oportunidad de incidir y elegir quiénes serían los candidatos del uribismo que disputarán el próximo años alcaldías y gobernaciones.
Petro: la izquierda radical se fortalece
Nunca antes Colombia había votado tan masivamente por un candidato de izquierda, menos por uno que tuviera una línea tan radical como la de Gustavo Petro.
El candidato de la Colombia Humana basó su discurso en la rabia que los colombianos sienten por el nivel de corrupción que enfrenta el país. Acertó. Y fortaleció esa rabia con el discurso de clases característico de la izquierda.
Con el apoyo de la maquinaria política de la izquierda (sindicatos, organizaciones sociales, comunidad LGBTI, congresistas, entre otras) Petro logró obtener 4.851.254 votos, los cuales posiblemente superará en la próxima vuelta. Y aunque las estadísticas señalan que no lograría obtener la presidencia de Colombia, esta votación, la formalización de su partido Decentes y los millones recursos que recibirá, le permitirán consolidarse en las elecciones locales que se celebrarán en 2019, enfocado en una nueva candidatura presidencial en 2022.
Petro sabe aprovechar lo que tiene a mano: no en vano, pese a la mala gestión que realizó cuando fue alcalde y a haberle generado a Bogotá un detrimento patrimonial de más de 2 billones de pesos (USD $816 millones), supo voltear esto a su favor al declararse como víctima del sistema y ubicarse en el segundo lugar en la jornada de ayer.
Sergio Fajardo le da vida al centro
Aunque muchos criticaron a Sergio Fajardo por su falta de firmeza frente a temas neurálgicos del país, su alianza con el senador de izquierda Jorge Enrique Robledo y haber elegido a Claudia López como fórmula vicepresidencial le bastaron para para resucitar la opción de centro, que venia perdiendo fuerza.
Aunque no logró pasar a segunda vuelta, Sergio Fajardo sí consiguió consolidar a la Coalición Colombia como la tercera fuerza política del país y con los 4.589.696 votos obtenidos podrá maniobrar dentro de la Alianza Verde para elegir los candidatos del próximo año.
Este triunfo también fortalece a Claudia López, quien es la más segura candidata a la alcaldía de Bogotá en 2019 y que, por ahora, no encuentra un contrincante capaz de hacerle contrapeso a su candidatura.
El centro solamente se verá fortalecido si Fajardo y quienes lo rodean no cometen el mismo error que Antanas Mockus (de quien Fajardo fue fórmula vicepresidencial) y su equipo en 2010, pues tras obtener 3.587.975 votos (una de las más altas votaciones para el centro) y haber afirmado después de perder ¿Y ahora qué? ¡Ahora todo!, no supieron aprovechar el respaldo obtenido en las urnas y dejaron que la opción de centro se debilitara.
Ahora solo queda esperar que después de lo afirmado por Fajardo tras aceptar su derrota, Vamos por el camino que es, no pierdan el rumbo y con ello, permitan que el centro se debilite nuevamente.
La Registraduría
Después de lo ocurrido en las elecciones internas del 11 de marzo, cuando se terminaron los tarjetones de votación del Centro Democrático, y tras la acusación de fraude realizada por Petro, la Registraduría logró recuperar su imagen y realizar unos comicios sobre los cuales ninguno de los candidatos tuvo queja. Además de ser los de más alta participación en una primera vuelta presidencial, pues esta pasó del 40,65 % y 49,29 %, en 2010 y 2014 respectivamente, al 53,38 % en estas elecciones.
Tras cerrar las urnas a las 4:00 p. m., la registraduría empezó rápidamente a dar el resultado del preconteo y a las 5:30 el mundo ya conocía el 90 % de los resultados. Con esto no solo recuperó su imagen, sino que obligó al candidato de izquierda a reconocer el trabajo de la Registraduría, pese a que 15 minutos antes del cierre de las urnas había afirmado que se estaban presentando procesos irregulares, como la no acreditación de 9.000 de sus testigos electorales, acusación que fue desmentida por el registrado Juan Carlos Galindo.
Otro triunfo de Uribe
Pese a las críticas recibidas por haber elegido como candidato a Duque y no a Nieto, el expresidente Uribe muestra una vez más que sabe mover sus cartas. No solo logró el pasado 11 de marzo consolidar a su partido político, el CD, como una de las mayores fuerzas del Congreso, sino que ahora, con Duque, el uribismo está más cerca de volver al poder. Esta vez liderado por un rostro fresco y alejado de los radicalismos que han caracterizado el CD.
Ahora la pregunta que algunos se hacen es qué papel tendrá en el Gobierno de Duque. Aunque muchos afirman que será él quien manejará el poder, es posible que el expresidente decida respaldarlo y no opacar la imagen del nuevo líder del CD, para darle así mayor margen de maniobra a su Gobierno, y asegurarse de que su bancada en el Congreso respalde a Duque.
Las firmas encuestadoras
A diferencia de lo ocurrido en 2014, las encuestadoras acertaron esta vez, no solamente sobre el lugar que ocuparía cada uno de los candidatos, sino que los porcentajes de votación de cada uno de ellos estuvo cerca a los presentado en las últimas encuestas.
Las encuestadoras habían tenido un duro golpe de credibilidad tras los resultados del plebiscito del 2016, pues la mayoría había dado como claro ganador al Si. Sin embargo, la votación estuvo reñida y el No se impuso por un poco más de 50.000 votos.
Aunque el modelo probabilístico de Cifras & Conceptos su falló, pues este daba como ganadores de la primera vuelta a Duque y al expresidente Germán Vargas Lleras, su su credibilidad no se verá afectada, pues los resultados de sus encuestas fueron acordes con lo ocurrido en la jornada electoral.
Otros ganadores
Después de verse rezagada a nivel político, la Alianza Verde logró fortalecerse, pues el triunfo en las elecciones del Congreso, de la mano de Antanas Mockus, y los votos obtenidos por Fajardo la posicionan nuevamente como una fuerza política con opciones de obtener gobernaciones y alcaldías el próximo año.
Aunque la imagen del expresidente César Gaviria se vio afectada por no haber apoyado a Humberto de La Calle y sí, en silencio, a Iván Duque, su jugada lo favoreció, y ahora podrá negociar un puesto en el Gobierno de Duque para su hijo, Simón Gaviria.