La irresponsabilidad fiscal y la emisión descontrolada no dan lugar a dudas: en Argentina, la salida del control de cambios no está en agenda. Mucho menos en un año electoral, en el que el Gobierno parece estar dispuesto a hacer cualquier cosa. Pero estos desajustes tienen consecuencias que terminan impactando en la economía y la inversión directa. Ahora, el MSCI confirmó que el país abandonará el status de “mercado emergente”, que había conseguido en la gestión de Mauricio Macri.
De esta manera, Argentina deja de estar en el grupo de Colombia, Chile, Brasil, México y Perú; pero la caída no fue de una categoría, como suele suceder tanto en ascenso como en descenso. El país se saltó el status de “Mercado de Frontera” y cayó directamente al de “Mercado Independiente”. Esta instancia, a pesar del nombre decoroso que pareciera edulcorar, lo que realmente significa tiene como característica que no cumple con requisitos de “liquidez mínima”.
“La prolongada severidad de los controles de capital sin resolución, no está en línea con los criterios de accesibilidad al mercado del índice de MSCI de Mercados Emergentes. Esto ha llevado a la reclasificación del índice MSCI Argentina de Mercados Emergentes a Mercados Independientes”, señaló Craig Feldman, jefe global de investigación de Gestión de Índices del MSCI.
Las reacciones en Wall Street no tardaron en llegar. Esta mañana, YPF abrió con una baja de 12 %. La energética Edenor perdió 8 % y BBVA Argentina 6,5 %. El que no baja y sube, lógicamente es el dólar, que ya cotiza en 170 pesos. Por su parte, el Riesgo País se ubicó en los 1551 puntos.