El Comité de Debate Presidencial anunció el jueves (8) de octubre que el segundo debate entre Donald Trump y Joe Biden será virtual debido a la infección de coronavirus contraída por el mandatario.
Los dos candidatos presidenciales estarían en lugares separados, según exige la comisión. Pero Trump se rehusó.
En una entrevista con Maria Bartiromo, de Fox Business Network, Trump dijo que el nuevo formato virtual anunciado por la Comisión de Debates Presidenciales no le parece aceptable. «No voy a hacer un debate virtual», aseguró.
Trump no tiene síntomas de coronavirus
El presidente no ha tenido síntomas de COVID-19 durante más de 24 horas y ni fiebre durante más de cuatro días, informó su médico, Sean Conley.
Desde el miércoles 7 de octubre Trump está de vuelta en la Oficina Oval, dijeron las autoridades, menos de una semana después de dar positivo. El presidente afirma que se siente muy bien después de su enfermedad, y la describe como «una bendición de Dios». Dijo que no era necesaria su hospitalización, pero asegura que los médicos lo exigieron así por ser el presidente.
A MESSAGE FROM THE PRESIDENT! pic.twitter.com/uhLIcknAjT
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 7, 2020
En un mensaje de video el miércoles, Trump dijo que todos los estadounidenses deberían tener acceso a los tratamientos que le dieron. También prometió proporcionar los medicamentos producidos por Regeneron Pharmaceuticals de forma gratuita y apuntó a la población anciana, la más afectada por el coronavirus.
El mandatario estadounidense dijo que el cóctel de anticuerpos experimentales que le dieron la semana pasada fue una cura, más que una medida terapéutica, y agregó que cientos de miles de dosis estaban casi listas. Pero los reguladores federales no han aprobado los medicamentos de Regeneron.
«Esta fue una bendición disfrazada. Lo atrapé, escuché sobre este medicamento, dije que me dejara tomarlo y fue increíble», y agregó que buscaría autorizaciones de uso de emergencia para los medicamentos.
Trump y Pence recuerdan responsabilidad de China
El presidente Trump afirmó su postura contra China, diciéndoles a los estadounidenses: «No van a pagar por ello. No fue su culpa que esto sucediera. Fue culpa de China. Y China va a pagar un alto precio por su culpa».
Lo mismo aseguró el vicepresidente Mike Pence en su primer debate con Kamala Harris, frente a la pregunta de la moderadora. Sin embargo, Pence aclaró que está dispuesto a negociar con China siempre y cuando sean claras las reglas del juego. Las estadísticas muestran a Pence como ganador del debate, en particular por su forma de mantener la calma. Su contraparte, en cambio, apeló más a la emotividad.
El segundo debate y su importancia en la comunidad hispana
Trump triunfó en la comunidad hispana en el primer debate. Y el segundo sería aún más importante, ya que se desarrollaría en el estado de Florida, donde los hispanos ejercen gran influencia, en particular los exiliados cubanos que respaldan la postura del presidente contraria al socialismo.
Además, Florida cumple un rol crucial, puesto que es un estado péndulo. Esto significa que el voto puede girar hacia cualquiera de los dos principales partidos. Son estos estados los que definen las elecciones.
En el 2016, por ejemplo, Trump ganó con el 49,0 % del voto popular en Florida con un margen de victoria del 1,2 % sobre Hillary Clinton, que obtuvo el 47,8 % de los votos.
Si bien Trump ganó en el estado, Hillary obtuvo 571 000 votos más que Trump en Miami-Fort Lauderdale. Para el presidente es necesario apelar a esa comunidad para garantizar su triunfo. Por ello y más exige poder llegar a sus votantes en persona y debatir en Florida con su rival Joe Biden.