José Antonio Meade, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México, informó que este país buscará diversificar sus relaciones comerciales con otros países y aprovechará las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La prioridad serán los acuerdos comerciales con Medio Oriente, la península arábiga y Turquía, informó Meade y agregó que se actualizaría el tratado con Europa.
“El esfuerzo que se ha hecho en la Alianza del Pacífico es uno de los procesos de integración que se han buscado para mejorar nuestras relaciones comerciales; también buscamos mejores accesos comerciales con el Medio Oriente, la península arábiga, Turquía y actualizar nuestros tratados de libre comercio con la Unión Europea”.
El funcionario mexicano explicó que diversificar los accesos comerciales con el mundo es uno de los principales retos que tiene el país, refiriéndose también a que la mayor afectación se tendrá en caso de que se cancele el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“La economía mexicana está como nunca sujeta a un proceso de incertidumbre que nos viene de fuera y nos da un contexto muy difícil en la definición de cómo habremos de integrarnos con la economía norteamericana. Esa incertidumbre gravita sobre las decisiones que tomamos y nos obliga a dar muestras de certeza”, señaló.
Según informó el secretario mexicano, “uno de cada 5 pesos de lo que México exporta se hace fuera de la región de Norteamérica, por lo que hay un primer corte; la máxima afectación se daría sobre este 80% que exportamos a EE. UU., y sobre éste, 45% de lo que importamos se verá impactado”.
Asimismo, Meade indicó que lo primero que se deberá hacer en caso de que Estados Unidos salga del TLCAN será identificar las mercancías o productos que están libres de aranceles y si forman parte de dicho acuerdo o fuera de él.”Si consideramos que se hace comercio con mercancías que no estaban dentro del acuerdo de 1994, alrededor de 44% de lo que vendemos se hace fuera del TLCAN, lo cual reduce el impacto”, dijo.
La posibilidad de una posible disolución del TLCAN, cada vez parece hacerse más presente, por lo que el país latinoamericano se prepara para un posible final de este pacto que mueve USD $1 billón en comercio anual.
Fuente: El Economista.