El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) informó que durante los primeros seis meses de este año (2017), 2.559 personas fueron detenidas “arbitrariamente” en Cuba.
El OCDH denunció el “creciente número de presos políticos” ante la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, y explicó que a pesar de que la cifra es “significativamente” menor en comparación a la del mismo período de 2016, “siguen siendo escandalosas y los niveles represivos son iguales o mayores”.
La organización señaló que el descenso del número de detenciones se debe al “cambio en sus mecanismos represivos” y no a un cambio positivo por parte de las autoridades de la isla.
De acuerdo al comunicado, el régimen pasó de los “encarcelamientos de mediana y larga duración” a “detenciones de corta duración”.
Asimismo, la organización denunció que el régimen cubano ha impedido la salida del país de al menos 65 activistas opositores, que están invitados a reuniones internacionales.
Por otra parte, el OCDH señala que el régimen también lleva a cabo “presiones y agresiones directas a hijos y familiares de los activistas”. “La confiscación o robo de bienes personales o de medios de trabajo a integrantes de grupos de la sociedad civil”, es otra forma de represión que está aplicando el gobierno cubano, según informó la organización.
La denuncia también señala la “fabricación de delitos penales comunes para intimidar o encarcelar a opositores” y la “prohibición e impedimento físico de la salida de los activistas de sus propias residencias”.
El “recrudecimiento de estos métodos represivos” está siendo “documentado” por observadores del organismo, informó el OCDH.
Fuente: El Nuevo Herald.