
Crudas imágenes de la agresión impune y brutal contra periodistas venezolanos demuestra que la prioridad del régimen de Nicolás Maduro es combatir la información veraz y no la delincuencia.
Mientras la delincuencia en Venezuela impera bajo la impunidad, los periodistas venezolanos son condenados como si informar fuera un delito; tanto así que ejercer dicha labor bajo el régimen dictatorial se ha convertido en un peligro.
Periodistas detenidos, golpeados, vilipendiados; así como reporteros gráficos víctimas de robo y maltratos por parte de las fuerzas de Seguridad del Estado, son parte de una campaña gubernamental para censurar a quienes asumen la labor de informar.
Bajo la campaña #InformarNoEsUnDelito, periodistas venezolanos condenan las violaciones del régimen venezolano mostrando en un material audiovisual cómo la prensa se está convirtiendo en víctima de ataques por tratar de informar lo que está ocurriendo en el país.
El video que está circulando en las redes sociales con la frase “menos balas, más verdad”, muestra algunas de las agresiones del medio centenar de profesionales de la información que han sido agredidos durante la cobertura de protestas y eventos públicos del acontecer nacional que, además, han surgido de la crispación política por el golpe de Estado alentado por el mismo presidente del país, Nicolás Maduro.
La campaña que se ha convertido en viral, evidencia casos como el de la periodista Elyangélica González, quien fue pateada y golpeada por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) frente a la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), donde se desarrollaba una protesta.
A todos esos gloriosos periodistas que no se callan, que siguen haciendo su trabajo informar lo que pasa! #InformarNoEsUnDelito pic.twitter.com/gTnKR5Owpo
— GéGé (@GegeRpz) April 15, 2017
Solo en las protestas del mes de abril, han sido 57 los periodistas que han resultado agredidos.
De acuerdo con el Instituto Prensa y Sociedad Venezuela (IPYS), tan solo entre el pasado 28 de marzo y el 8 de abril se registraron por lo menos 25 limitaciones a la cobertura de asuntos de interés público, 19 agresiones físicas, 11 hechos de intimidación, 4 ataques contra equipo de trabajo, 3 detenciones arbitrarias, 3 robos y 1 ataque contra la sede de un medio de comunicación.
Asimismo, determinaron que de los 39 trabajadores de medios que han sido afectados, 21 fueron reporteros, 10 reporteros gráficos, 5 corresponsales extranjeros, 2 camarógrafos y 1 reportero ciudadano.
A pesar de las denuncias tanto a nivel nacional como internacional de estas violaciones de los derechos; el gobierno continúa reprimiendo y poniendo trabas a aquellos que buscan informar a la población de lo que ocurre en Venezuela.
Fuentes: Diario Contraste; Entorno Inteligente.