Tras 11 horas de discusión en el Congreso de Colombia, fue aprobado el nuevo Código de Policía, que pretende regular el actuar de los ciudadanos y establecer la forma en que la institución debe reaccionar a la hora de judicializar individuos en situaciones de alteración de orden público, afectación de los servicios públicos por parte de terceros, vecinos ruidosos, explotación laboral de mascotas y robo de celulares, entre otras situaciones.
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La propuesta fue aprobada tras una gran polémica generada por los congresistas del Polo Democrático, principal partido de oposición, y la Alianza Verde, un partido con muchos matices ideológicos dentro de sus militantes, quienes consideraron que con el nuevo Código de Policía vulnera derechos y libertades de las personas.
Dentro de las modificaciones que más generaron polémica se encuentran la prohibición para el uso de gas pimienta por parte de los ciudadanos y la prohibición de hacer grafitis. Esta última fue fuertemente criticada por el Representante a la Cámara por Bogotá Inti Asprilla, quien considero la medida como una forma de estigmatizar a los jóvenes y resaltó el caso de Diego Felipe Becerra, un joven asesinado por un policía mientras realizaba un graffiti. Sin embargo, el representante Asprilla no hizo referencia a la protección de otros derechos, como la propiedad privada, que pueden ser violentados a través de esta práctica.
Además, fue aprobado el hecho de que los policías puedan registrar a las personas y sus hogares sin necesidad de una orden judicial, lo cual ha sido un fuerte foco de discusiones ya que, quienes se oponen, consideran esta medida como una forma de violentar a los ciudadanos. Actualmente, en Colombia se necesita una orden judicial para ingresar a un domicilio o registrar efectos personales.
Otro hecho que generó polémica fue el de la aprobación para construir un centro de refugio temporal para cuando los habitantes de la calle sean arrestados. Sobre esto, la Representante a la Cámara por la Alianza Verde, Ángela María Robledo, dijo que era una medida inconstitucional.
“Reconozco que es una medida problemática pero la manera como está redactado viola el bloque de constitucionalidad y la sentencia 040 del 2006, que señala que la mendicidad no es un delito, no es una contravención y, por lo tanto, no puede decretarse una reclusión ni en clínica, ni en hospital, ni establecimiento público”, afirmó la representante Robledo.
En caso de incumplimiento por parte de la ciudadanía a faltas menores, los culpables podrán ser multados y en algunos casos judicializados. Además, si se da la situación de un vecino ruidoso que atente contra la paz de un vecindario, la policía tendrá la facultad de cortar los servicios de electricidad para mitigar el ruido.
Finalmente, Asprilla y Robledo criticaron el hecho de que el nuevo código establece que para realizar una protesta hay que hacer un aviso previo de 48 horas, para que así las autoridades estén preparadas para realizar el acompañamiento. Los dos congresistas consideran que es una falta al derecho a la protesta.
Por su parte, el Representante a la Cámara Harry González, uno de los ponentes del nuevo código de policía, manifestó que:
“Es un Código de Policía que brinda garantías constitucionales, crea mayores controles a la Policía que estarán a cargo del Ministerio Público e incluimos un sistema sólido de quejas y reclamos frente a las actuaciones de las autoridades”
PanAm Post consultó al abogado Mario Daza, quien manifestó que el nuevo código, a pesar de ser novedoso, no deja de ser anacrónico, ya que es nuevo pero no responde a las necesidades actuales de la ciudadanía.
“El código aunque, sea posterior a la Constitución de 1991, no se ajusta a los lineamientos de recomendación dados por la comisión del Consejo de Política Criminal, porque no diferencia entre lo que es función y autoridad de policía, lo cual es importante. Ademas, cuenta con preceptos que son bastantes polémicos, tales como entrar a la propiedad privada sin orden judicial, cerrar establecimientos de comercio (cuestión que lo tiene que hacer las entidades territoriales y no esta institución)”, manifestó Daza
Lo cual busca responder a las inquietudes que tienen los Representantes del Polo Democrático y de la Alianza Verde. Cabe resaltar que, aunque las modificaciones al código ya fueron aprobadas, el Senado (la otra cámara del Congreso Colombiano) hará la conciliación final del texto y en ese momento será enviado a sanción presidencial, es decir, a la aprobación final que se sella con la firma del Presidente Juan Manuel Santos.
Fuentes: El Colombiano, El Tiempo