El canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, acusó a uno de los cabecillas y ahora político de las FARC, Rodrigo Granda, —conocido antiguamente como el ‘canciller’ de esa guerrilla—, de haber sostenido reuniones con el narcoguerrillero Iván Márquez desde hace un año.
En el marco del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que aprobó con mayoría la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) para Venezuela, el canciller Holmes afirmó que Granda y otros guerrilleros que están en la clandestinidad, tuvieron varios encuentros en ese país.
“La declaración de alias Iván Márquez, alias Santrich y otros de sus cómplices sobre la fundación de un nuevo grupo narcoterrorista, responde a las actividades que ese nuevo grupo adelanta con las facciones del régimen venezolano. Desde hace por lo menos un año alias Márquez y alias Granda mantenían relaciones clandestinas en Venezuela y ahí están los detalles de esas relaciones”.
Canciller @CarlosHolmesTru expuso ante Consejo Permanente de @OEA_oficial que la protección del ELN por parte del régimen de Nicolás Maduro es un riesgo para la seguridad nacional de Colombia y además genera nuevos elementos de inseguridad para la paz en la región pic.twitter.com/KmmHV2GpfY
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) September 12, 2019
De acuerdo con Holmes Trujillo, Márquez y Granda estuvieron en territorio venezolano. Allí se establecieron varias estrategias para denunciar presuntos incumplimientos del Gobierno de Iván Duque en relación con la implementación del acuerdo celebrado entre el Gobierno del expresidente Juan Manuel Santos y las FARC. En este sentido, el canciller colombiano calificó que estas acciones no son nada más que “falsedades, mentiras, calumnias y una acción política contra el régimen democrático colombiano”.
Permisos a Venezuela por parte de la JEP
En octubre de 2018, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), autorizó la visita de varios dirigentes de FARC a Venezuela, entre ellos se encontraba Rodrigo Granda. La visita fue concedida por el plazo de una semana con destino a la ciudad de San Juan de los Morros, capital del Estado Guárico. Su gobernador, Ramón Rodríguez Chacín, fue acusado por su cercanía con las guerrillas de FARC y ELN. Por esta cercanía, en septiembre de 2008 el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, le congeló al político chavista sus bienes por presuntamente ser el principal contacto del régimen de Hugo Chávez para dotar de armamento a las FARC.
A finales de julio de 2019, la misma justicia especial autorizó la visita a Venezuela de Rodrigo Granda y Carlos Antonio Lozada, con el fin de asistir a XXV Foro Sao Paulo en Caracas. Esto con el fundamento de ejercer la acción política de los miembros de la antigua guerrilla. La vocería de los hombres de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), fue clave pues en dicho encuentro no escatimaron en enarbolar las banderas del socialismo del siglo xxi. En el encuentro, Carlos Antonio Lozada, envió un guiño al régimen, asegurando que las FARC ahora como movimiento político tiene un reto inmenso y es construir la “Patria Bolivariana”.
#EnVideo ? | Carlos Antonio Lozada, integrante de las FARC Colombia en XXV Foro de São Paulo: Tenemos un reto inmenso que es acabar de construir la Patria Bolivariana que ustedes pueblo venezolano han iniciado. Gracias por todo su ejemplo de lucha #VenezuelaForoVictorioso pic.twitter.com/kD3Y19Pa4t
— VTV CANAL 8 (@VTVcanal8) July 27, 2019
Para ese entonces, Granda manifestó que no existía una agenda secreta en la que se vayan a encontrar con Márquez y con Santrich; y que los otros miembros del partido FARC desconocían el paradero de sus antiguos camaradas. En el evento de socialistas, Maduro elogió a los guerrilleros prófugos de la justicia, Iván Márquez y Jesús Santrich, y aseguró que los esperaba en el Foro de Sao Paulo.
La cercanía entre Granda y Venezuela
Los nexos de Granda con el régimen venezolano se remontan al incidente diplomático que ocurrió en diciembre de 2004, cuando fue arrestado en Caracas, Venezuela. En su momento, el régimen de Chávez aseguró que dicha captura se logró violando la soberanía venezolana con complicidad de policías, que fueron sobornados por el entonces Gobierno del expresidente Álvaro Uribe.
Chávez como de costumbre vociferó en contra de los Estados Unidos, por presuntamente dañar las relaciones diplomáticas entre los dos países suramericanos; y le pidió al expresidente Uribe perdón por la captura del guerrillero. Disculpa que el exmandatario rechazó, aseverando que Colombia era el país ofendido, ya que el régimen de Venezuela “daba refugio a terroristas de las FARC”. Sin duda, este hecho puso de manifiesto el valor de Granda para el régimen chavista y demostraba el beneplácito con esa guerrilla en territorio.
La presencia de Granda en Venezuela se debía a un presunto acercamiento que estaba realizando la guerrilla de las FARC y el Gobierno francés, que pedía la pronta liberación en ese entonces de la política colombo-francesa, Ingrid Betancourt, secuestrada por esa guerrilla en el municipio de Florencia, Caquetá, cuando hacía campaña política a la presidencia en febrero de 2002. El Gobierno colombiano señaló que el guerrillero no estaba facultado para hacer esa mención y que tampoco se le había notificado de esa gestión por la presunta liberación de la política colombiana. Betancourt fue liberada el 2 de julio de 2008 por las fuerzas militares durante el desarrollo de la Operación Jaque.
Chávez rompió relaciones con Colombia y llamó a consultas a su embajador en Bogotá. Además, de ordenar el cierre de la frontera entre Venezuela y Colombia por el lapso de dos meses. El expresidente Uribe, por mediación del expresidente francés Nicolás Sarkozy, ordenó la libertad de Granda el 4 de junio de 2007. Sin embargo, el jefe guerrillero no perdió contacto con el régimen venezolano, a finales de ese año volvió a Venezuela a una reunión con la excongresista de izquierda Piedad Córdoba y con el cabecilla Iván Márquez, para adelantar gestiones que buscaban, supuestamente, la libertad de secuestrados que se encontraban en poder de las FARC.