El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha disuelto este miércoles el consejo asesor que estaba compuesto por líderes empresariales. El gobernante tomó esta decisión a raíz de una ola de renuncias que se dieron esta semana luego que los empresarios catalogaran como “débil” la condena que hizo el republicano a los disturbios en Charlottesville, Virgina el pasado fin de semana que dejaron una persona muerta.
En un inicio el presidente estadounidense había hablado de “poner presión” a los empresarios, sin embargo este miércoles desistió de ello y decidió poner fin a los consejos ejecutivos.
Y es que la mañana de este miércoles, luego de que a inicios de semana cuatro importantes empresarios ya habían abandonado el consejo consultor del presidente Trump, al menos una docena de otros destacados CEOs tomaron la decisión de también abandonar el grupo.
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“La intolerancia, el racismo y la violencia no tienen absolutamente ningún lugar en este país y son una afrenta a los valores estadounidenses centrales”, expresó el grupo de empresarios por medio de un comunicado en donde también indican: “Creemos que el debate sobre la participación en el grupo se ha convertido en una distracción de nuestro deseo sincero y bien intencionado de ayudar a las discusiones políticas vitales sobre sóo mejorar las vidas de los estadounidenses”.
Según Anat R. Admati, profesor de finanzas y economía de la Escuela de Negocios de Standford los empresarios se encontraban ya en una posición bastante incómoda por el presidente Trump e indicó que “esto ha arruinado sus relaciones con algunos de ellos”.
Los consejos consultivos presidenciales son en gran parte ceremoniales, destinados a dar a la comunidad empresarial una línea con la Casa Blanca. Pero en la administración Trump, los consejos se han convertido en entidades políticamente cargadas, ya que a los ejecutivos de los grupos se les ha pedido de manera rutinaria que defiendan las opiniones y políticas impopulares del presidente.
Fuente: The New York Times