La manipulación de cifras en la incidencia delictiva y especialmente en los homicidios en México se da por su mala clasificación y el subregistro de los mismos, esto es un obstáculo para que tanto las autoridades como la ciudadanía puedan tener conocimiento de la realidad de la situación que viven y además provoca que los diagnósticos que se realizan para la creación de políticas públicas sean erróneos y por ende las legislaciones no cumplan su objetivo.
Esta información ha sido revelada en el informe “Cada víctima cuenta: hacia un sistema de información delictiva” desarrollado por el centro de análisis de políticas públicas México Evalúa que revela los vacíos procesales que hay en el proceso, desde cuando se interpone la denuncia hasta que se realiza la contabilización de estadísticas en las procuradurías y fiscalías de los estados mismas que entregan dichos datos al Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Dichas falencias abren espacio para que se refleje una disminución en las cifras por medio de la eliminación de su registro ya sea por una estrategia deliberada o por una orden de autoridades superiores. Para México Evalúa, esto tendría como objetivo el mostrar reducción de los “delitos de alto impacto” dentro de los que se encuentra el homicidio.
La revisión se realizó a los últimos 20 años de registros y se notó que “a partir de enero de 2008 (un año después del inicio de la ‘guerra contra el narcotráfico’, implementada por el expresidente Felipe Calderón), se presenta un aumento sustancial y sostenido en la tasa de homicidios dolosos hasta alcanzar un máximo de 1,86 homicidios por cada 100 mil habitantes en mayo de 2011” asegura el documento.
- Lea más: El alto costo de la violencia en México: 18% del PIB
- Lea más: México: según autoridades la violencia en Sinaloa es por sucesión de “El Chapo”
“Posteriormente, de finales de 2012 a principios de 2015, dicha tasa presenta una disminución sustancial, alcanzando un nivel de 1,05 homicidios en febrero de 2015. Finalmente, a partir de marzo de 2015, se presentó un nuevo aumento en el número de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes, llegando a una tasa de 1,59 homicidios en agosto de 2016” detalla el reporte que también indica que la manipulación de las cifras puede darse en cualquiera de los tres momentos del proceso judicial: siendo el primero el acto de subregisto que se da al momento de que el afectado presenta la denuncia ya que pueden intentar convencerlo de no hacerlo.
Un segundo momento de vulnerabilidad es la clasificación del delito, ya que esta acción está sujeta al criterio del servidor público que reciba la denuncia ya que es quien tiene la responsabilidad de valorar si el delito denunciado es doloso o culposo. No todas las fallas en este paso son deliberadas, advierte México Evalúa, sino que también se pueden deber a la falta de capacitación del personal, a declaraciones falsas o efectivamente de una orden superior para manipular los datos.
El tercer momento es cuando las denuncias llegan al centro estadístico de las instancias como procuradurías o fiscalías generales para que se generen o actualicen reportes impactando en el informe mensual que publica el Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Dentro de los estados en los que la organización mencionada detectó este patrón de cuantificación de hechos delictivos, se encuentra Nayarit, Estado de México, Coahuila, Puebla, Quintana Roo, Tlaxcala, Tabasco, Veracruz, San Luis Potosí, de los cuales cuatro tendrán proceso electoral el próximo 4 de junio.
“La manipulación tiende a hacerse más visible o probable en periodos previos a las elecciones; sin embargo hubo resultados muy modestos, es decir, que tiene efecto pequeño. No es una práctica que en sí misma nazca a partir de los periodos o las contiendas electorales” expresó Jonathan Furzsyfer, autor del reporte.
Fuente: El Universal