El sector productivo colombiano despidió el pasado 31 de diciembre un año negro para la economía. En marzo de 2020, el presidente Iván Duque instauró una de las cuarentenas más largas de Latinoamérica.
Si bien Duque terminó la cuarentena hacia el final del año, los daños macroeconómicos ya estaban hechos. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), Colombia cerró el año con una cifra de desempleo de 13,3 % y con un desplome del PIB que lo hizo entrar en recesión. La economía registró números negativos en el segundo y tercer trimestre del año de -15 % y -9 %, respectivamente, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Al analizar el desplome de la economía por sectores, la situación es mucho más alarmante. Por ejemplo, la industria manufacturera tuvo una producción de -9,7 % y el personal ocupado en dicha industria fue de -6,7 %. Otros rubros que cayeron drásticamente fueron el comercio al por menor y vehículos (-12,6 %). Teniendo en cuenta las cifras de enero a noviembre de 2020, el descenso de las exportaciones fue de 22,5 % con respecto al mismo período del año anterior. Lo mismo sucede con las importaciones. Los valores de enero a octubre de 2020 reflejan una caída de 19,9 % con relación al mismo período de 2019.
Expectativas de crecimiento
Ante lo expuesto, la administración Duque hizo esfuerzos en pos de una recuperación económica segura y estable para 2021. En ese sentido, el Gobierno logró aprobar dos leyes de vital importancia.
La primera de ellas, vinculada con la industria turística. La nueva legislación establece la disminución del IVA a un 5 % para los pasajes aéreos, mientras que los servicios de hotelería y turismo estarán exonerados del impuesto. También designa una tarifa especial en la tasa impositiva sobre la renta para la construcción de hoteles y parques temáticos. Además, se aprobó la reducción del impuesto al consumo al 0 % por todo el año 2021, con lo que se espera incentivar la asistencia a restaurantes y bares. Con esta nueva ley el Gobierno colombiano estima impulsar uno de los sectores más golpeados por el coronavirus.
Como segunda medida, el Congreso aprobó la ley “Reactivarte”, con la que se establecen incentivos para el sector de las industrias creativas o “economía naranja”.
Los principales gremios comerciales de Colombia tenían grandes expectativas para crecer durante este año, en parte gracias a los incentivos promovidos por el presidente Duque. La Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) expresó: “Hoy no se trata solo de crecer, debemos hacerlo en forma acelerada. La velocidad del crecimiento será crucial”.
Ciudades condenadas por la ineficiencia de sus gobernantes
A pesar de que las buenas intenciones de Duque se hayan logrado materializar en varias leyes enfocadas en la recuperación económica, dicho camino está obstaculizado por el proceder de ciertos alcaldes que han terminado por colocar en una situación crítica al comercio en distintas jurisdicciones.
En efecto, las tres principales ciudades del país son gobernadas por alcaldes que contrarían las medidas que imponen a la ciudadanía. Dichas administraciones se han caracterizado por la improvisación y la toma tardía de medidas para contener el COVID-19.
Bogotá es una de esas ciudades. Mientras la alcaldesa Claudia López disfruta de unas vacaciones en Costa Rica, se acaba de decretar una cuarentena estricta en varias localidades de la capital colombiana. Dicha medida afecta a los comerciantes que quieren reactivar el sector.
La Federación Nacional de Comerciantes (FENLCO) ha criticado seriamente la medida de López. Para el gremio, la cuarentena solo castiga a los comerciantes formales que han cumplido con todos los protocolos de bioseguridad.
Una vez más se activa la #CuarentenaEstricta en localidades en Bogotá y otras medidas restrictivas en algunas ciudades del país, afectando la reactivación económica y el empleo.
— Fenalco Nacional (@FenalcoNacional) January 4, 2021
Cali también es gobernada por un alcalde que ha traído varias vicisitudes a la ciudad. Se trata de Iván Ospina, perteneciente al partido Alianza Verde. Como primera autoridad administrativa de la ciudad, decidió recibir el año 2021 con un toque de queda que inicio el 31 de diciembre de 2020 y terminó el 3 de enero.
Asimismo, mientras mantiene fuertes restricciones al comercio, anunció toque de queda para el puente festivo de Día de Reyes. Manuel Pineda, presidente de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Cali, ha criticado fuertemente al mandatario local, afirmando que con estas medidas se está afectando la economía.
Las restricciones llevan al desespero de un comerciante endeudado y un empleado sin sueldo y sin comida en su hogar. Eso lleva a la clandestinidad donde el control no existe. sale más cara la cura que la enfermedad. Todo por falta de atención y ayudas del gobierno #saludconempleo
— Manuel Pineda Villarreal (@manuelpineda999) January 4, 2021