Las transmisiones televisivas de Nicolás Maduro cada vez lo hunden más ante la opinión pública en Venezuela; esto porque al mandatario se le ha hecho imposible ocultar la crisis humanitaria que enfrenta el país hasta en sus propios programas.
Primero fue una estudiante del colegio estatal que le pidió ayuda a Maduro para mejorar la infraestructura de su escuela porque hasta el “techo se está cayendo”; en la misma petición, la chica aprovechó para comentarle al mandatario que los niños en su escuela se desmayan porque no tienen comida ni en sus casas ni en el comedor escolar.
Luego durante otra transmisión de televisión, una madre soltera le dijo a Maduro que no tiene cómo alimentar a sus hijos, algo que el Jefe de Estado decidió ignorar y cambiar de tema bromeando con el nombre peculiar de la mujer necesitada.
De acuerdo con un reportaje de la agencia de noticias Reuters, las impredecibles visitas televisadas a las clínicas o escuelas de Nicolás Maduro, creadas con la intención de suavizar su imagen, para lo único que han servido es para desprestigiar aún más al mandatario de Venezuela.
“En la medida en que tratan de esconder la realidad, siempre sale y la realidad los golpea en vivo por televisión “, dijo el líder de la oposición, Henrique Capriles, en un reciente discurso a una comunidad local.
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Capriles además afirmó que el único que ha ganado peso en Venezuela es Nicolás Maduro; “ya no cabe en la pantalla del televisor”; sentenció el líder opositor.
Y es que en el país suramericano al 93% de los venezolanos no les alcanza el dinero para alimentarse durante todo el mes; mientras que el 73% de ellos ha bajado de peso en el último año.
“Estamos más hambrientos de día”, dijo la madre de dos niños que perdió unos 23 kilos (50.7 libras) el año pasado porque ella sobrevive con arroz, plátanos y tortas de maíz.
Al tiempo en que cientos de venezolanos se alimentan de la basura, Maduro bromea en televisión y comenta sobre sus lujos alimenticios. Recientemente comentó cuánto disfrutaba un pollo cocinado en salsa de vino.
Fuente: Reuters