
Por la falta de aprobación de las autoridades cubanas, la empresa estadounidense Pearl Seas Cruises se vio obligada a cancelar cinco viajes a la isla dejando “embarcados” a sus clientes.
La empresa de cruceros, que anunció en julio de 2015 que lanzaría viajes de 10 noches desde Estados Unidos a Cuba, ha esperado por el permiso del Gobierno cubano para poder cumplir, pues planificó seis salidas para marzo y abril que no ha podido hacer.
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La empresa comenzó a tomar las reservaciones para los camarotes con tarifas que empezaban con US$ 7.810 por persona, pero las cancelaciones obviamente comenzaron por la falta de autorización del Gobierno cubano.
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De acuerdo con el portal web Martí Noticias la primera salida en ser cancelada fue la del 6 de marzo; seguida de otras, los días 16 y 26 de ese mes. La empresa añadió salidas programadas para el 5 de abril y el 15, que también fueron suspendidas.
Las navegaciones planificadas por Pearl Seas esperaban zarpar de Miami y Fort Lauderdale con paradas en siete puertos cubanos: La Habana, María La Gorda, Cienfuegos, Trinidad, Santiago de Cuba, Parque Nacional Alejandro de Humboldt y Holguín; con una duración de 10 noches. Las cancelaciones, la incertidumbre y la molestia de ver frustradas sus vacaciones a última hora tiene a los clientes furiosos.
Analistas estiman que una de las cosas que dificulta los negocios con la isla es que el control político de la justicia impide a esta jugar papel alguno en la corrección de las desviaciones del sistema.
Fuente: Martí Noticias.