Kamalesh Sharma, secretario general de la Mancomunidad de Naciones —más conocida como la Commonwealth—, confirmó el compromiso de la organización con la soberanía territorial de Guyana ante Venezuela; e indicó que los Gobiernos miembros de la Commonwealth se han comprometido a encontrar una solución pacífica.
Sharma convocó a una reunión para el mes de septiembre en la ciudad de Nueva York con el Grupo Ministerial de la organización, para discutir el tema junto a los ministros de Asuntos Exteriores del grupo que reúne a países angloparlantes que en algún momento fueron colonias británicas, con dos notables excepciones (Mozambique y Ruanda).
En la última ocasión en que se reunieron los Jefes de Gobierno de la Commonwealth, en Sri Lanka, en 2013, “los líderes reafirmaron su apoyo inequívoco para el mantenimiento y la preservación de la soberanía y la integridad territorial de Guyana” expresó Sharma en un comunicado del diario jamaiquino The Gleaner.
A pesar de los problemas limítrofes existentes, los inconvenientes mayores entre Guyana y Venezuela comenzaron el 28 de febrero del presente año, cuando Guyana emitió una advertencia a Venezuela, exigiéndole que “desista de interferir” en sus esfuerzos de exploración petrolífera en aguas cuya soberanía aún es discutida entre ambos países.
Para el 10 de junio, las relaciones entre ambos países se habían fracturado mucho más, luego de que el gobierno guyanés otorgara una concesión a la petrolera estadounidense Exxon para explotar y extraer crudo en aguas en disputa. Por su parte, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, el Gobierno venezolano acusó al vecino país de “intentar crear una crisis artificial”.
La reacción de Venezuela surge en defensa de las críticas del Gobierno de Guyana al decreto Presidencial 1787, en donde el Gobierno de Nicolás Maduro constituyó las Zonas Operativas de Defensa Integral Marítima e Insular (Zodimain), que resguarda sus derechos de soberanía y defensa del territorio.
A raíz de toda la controversia, Guyana también dejo claro que estaría pidiendo al Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, un acercamiento a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en un esfuerzo por resolver 60 años de controversia.
Fuente: El Nacional.