El mediodía de este martes, la Cámara Federal de Argentina ordenó la detención del diputado nacional y exministro de Planificación Federal de Néstor y Cristina Kirchner, Julio De Vido. La medida está relacionada con la causa que investiga la supuesta defraudación al Estado nacional en el desarrollo de una mina de carbón ubicada en Río Turbio (provincia de Santa Cruz).
- Lea más: Cristina Fernández no quiere cerca a ultrakirchneristas que afecten su imagen en plena campaña
- Lea más: ¿Cristina Kirchner dispuesta a darle la espalda a su exministro De Vido procesado por corrupción?
Uno de los camaristas manifestó que existen “indicios de entidad suficiente como para presumir que su libertad constituye un riesgo para el proceso en curso, su encarcelamiento resulta la única alternativa viable para garantizar el éxito de esta investigación”.
Según la jurisprudencia argentina, los acusados deben permanecer en libertad durante el debido proceso con dos excepciones: o que exista la posibilidad que la persona fuera de la cárcel pueda generar un entorpecimiento de la causa o que pueda haber un riesgo de fuga.
Como Julio De Vido en la actualidad es diputado (el oficialismo fracasó en su intento de expulsarlo de la Cámara por no alcanzar la mayoría especial requerida), el juez de la causa debe solicitar al parlamento que se inicie el proceso de desafuero para que pueda realizarse la detención.
La que festejó la novedad fue la diputada oficialista Elisa “Lilita” Carrió, quien desde elaño 2004 mantiene un fuerte enfrentamiento con el exministro kirchnerista, cuando lo acusó de ser el “cajero” de los Kirchner. “¡Qué caviar, qué champagne!”, resaltó la líder de la Coalición Cívica cuando se confirmó el pedido de detención de De Vido.