En el 2017 la economía de México crecerá menos de lo previsto debido a los sismos que golpearon a este país en el mes de septiembre, según advirtió Bank of America (BofA) Merrill Lynch.
“La desaceleración está a la vuelta de la esquina”, indica la institución bancaria en su reporte, y precisó que el producto interno bruto (PIB) de México llegará a 1,9 % cuando se había ubicado en 2,1 %, según prevé Carlos Capistrán, economista en jefe para el país azteca y Canadá del BofA.
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“El impacto en la economía del segundo terremoto es mayor, aunque fue de menor magnitud. La contracción en septiembre debido a los terremotos junto con la contracción del IGAE en julio, nos llevó a reducir nuestra expectativa del crecimiento anual del PIB por debajo del 2 %”, indica el informe.
El primer sismo se registró el 7 de septiembre, afectando los estados de Oaxaca, Tabasco y Chiapas, entidades que representan el 6,4 % de la economía del país azteca. Pero un segundo sismo tuvo lugar el 19 de septiembre, y afectó a la Ciudad de Mexico, Puebla, Morelos y el Estado de México, en donde se concentra el 30 % del PIB.
Según Capistrán, el Gobierno de Enrique Peña Nieto puede utilizar el 1 % del PIB para la reconstrucción y apoyar a los damnificados, pero aún así tendría un superávit primario en lo que resta de su administración: “Estimamos que estos recursos tendrán un impacto positivo en la economía durante el último trimestre de 2017 y la primera mitad del 2018. El apoyo fiscal nos llevó a incrementar nuestro pronóstico de crecimiento del PIB para 2018 a 1,6 % de 1,3 %”.
BofA espera que se de una desaceleración en la economía de México, sin embargo, esta sería menos aguda que antes debido a una menor consolidación fiscal posterior a los sismos. Además, prevé que el siguiente movimiento sea un recorte por parte del Banco Central de México (Banxico), esto motivado por la desaceleración en la actividad económica y la inflación que BofA ha anticipado.
Fuente: Forbes México.