En la mañana del pasado lunes 23 de agosto, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, arribó a Jerusalén y dio inició a su gira en Medio Oriente, donde se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
La gira, que incluye Sudán, Bahrein y Emiratos Árabes Unidos, surge en vísperas del acuerdo de paz entre este último e Israel. Pompeo ha destacado los avances que se han alcanzado tras el anuncio del nuevo pacto, como la puesta en marcha de vuelos directos entre Tel Aviv y los países del golfo y las ya anunciadas ventajas competitivas para los dos países en materia comercial, energética y de seguridad. Otra de las prioridades de esta visita es la de contrarrestar la influencia de Irán, China y Rusia en la región es respaldar la transición democrática en Sudan.
Por su parte, la dictadura iraní se ha manifestado en contra de los llamados Acuerdos de Abraham y los ha calificado como una estocada final en contra de Palestina.
El fortalecimiento de Irán en la región ha llevado a que Estados Unidos intensifique diplomáticamente sus alianzas en Medio Oriente después de su derrota en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) tras intentar prorrogar de manera indefinida el embargo de armas impuesto a Irán desde 2015 y que expira el próximo octubre. Para evitar esta prórroga, Irán contó con el respaldo de China y Rusia.
En su visita a los Emiratos Árabes Unidos, Pompeo hizo énfasis en la construcción de la paz y la estabilidad regional, incluido el apoyo a un alto el fuego en Libia y la unidad del Golfo.
Excited to arrive in the United Arab Emirates and congratulate the Emirati people on the historic Abraham Accords– the most significant step toward peace in the Middle East in over 25 years. Hopeful we will build on this momentum towards regional peace. pic.twitter.com/WdICQ9V8kN
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) August 26, 2020
Irán, por su parte, ha venido fortaleciendo sus alianzas con Turquía, Rusia y China. Este último ha propuesto una inversión de más de 350 000 millones de euros en banca, servicios e infraestructura a cambio de suministro de petróleo por 25 años. Por su parte, Rusia está dispuesto a cooperar en materia militar y ser el principal aliado de la dictadura iraní en la región.
Las sanciones impuestas por Estados Unidos parecen no detener el ambicioso plan nuclear del régimen, que recibió la visita del director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, con el objetivo de abrir un canal de diálogo «fructífero, de cooperación, directo y necesario» en materia nuclear. Frente a esta visita, el vicepresidente Alí Akbar Salehí, director de la Organización de Energía Atómica iraní declaró: «Las conversaciones de hoy han sido constructivas».