Para los próximos días se espera que La Moneda le haga llegar al Parlamento de la República de Chile un proyecto de ley de migraciones, que crea un Registro Nacional de Extranjeros que define un catálogos de derechos en salud, educación y trabajo.
Esta normativa es de carácter reservado y tendrá la finalidad de flexibilizar el ingreso y permanencia de los inmigrantes del país.
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Este proyecto de ley de migración ya llevaba varios meses siendo diseñado por la mandataria Michelle Bachelet y se estableció como tope de ingreso al Congreso el 30 de enero para su tramitación.
Uno de los puntos que se encuentra generando polémica es el que establece que la comisión de un delito, no obligará la expulsión inmediata. Si un residente temporal o permanente realiza cualquier delito, quedaría sujeto a las mismas sanciones que las de un ciudadano chileno y no podría ser expulsado.
Para los migrantes ilegales o en situación irregular también se proponen modificaciones. En la normativa actual las expulsiones ante ese tipo de situaciones son discrecionales por parte de Interior y se hacían a través de decretos, pero con la modificación que se quiere incluir estas expulsiones podrán ser apeladas por él o los afectados.
Este último caso, puede interponer un recurso jerárquico en contra de la medida de expulsión y las autoridades administrativas tendrían que pronunciarse en un período máximo de 60 días hábiles; ello crearía todo un proceso que eliminaría la expulsión inmediata.
Adicionalmente, si esa medida persistiera, quedaría todavía una posibilidad de que el inmigrante que se encuentra en riesgo de ser explulsado pueda recurrir ante la Corte de Apelaciones y esta tendría un plazo máximo de 30 días para resolver el problema.
Fuente: La Tercera