Actualmente se le está haciendo un llamado a los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) para que expliquen y demuestren realmente lo que significa la democracia para ellos y hasta dónde están dispuestos a llegar para defender sus ideales.
Este jueves el Consejo Permanente de la OEA pondrá a prueba la democracia venezolana en una sesión extraordinaria producto de un llamado de su secretario general, Luis Almagro, a pesar de las protestas del régimen de Venezuela. Si finalmente se determina que el país sudamericano ha violado la Carta Democrática Interamericana, Venezuela podría verse suspendido de la organización de 34 naciones.
Es así como las naciones miembros de la OEA consultarán entre sí para determinar si el Gobierno venezolano cumple las normas democráticas fijadas en la Carta Democrática Interamericana, un documento vinculante que faculta a la OEA a actuar en casos de “alteración del orden constitucional” en un país miembro.
Almagro expondrá ante los embajadores de los 34 países del foro regional un contundente informe sobre la situación de Derechos Humanos y políticos en Venezuela. Con el documento de 132 páginas invoca a la mencionada Carta.
El exministro de Relaciones Exteriores de Uruguay comentó sobre el informe hecho público el 31 de mayo y señaló que “la crisis institucional en Venezuela demanda cambios inmediatos en las acciones del Poder Ejecutivo”.
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Adentro de Venezuela, según reseña El Nuevo Herald, la oposición acusa a Maduro de desconocer el Parlamento, limitar la libertad de expresión y encarcelar a dirigentes por razones políticas, entre otras denuncias, mientras que el oficialismo insiste que estas acusaciones son falsas.
De manera que se necesita el voto de al menos 18 países a favor de la aplicación de la Carta Democrática para que la OEA tome medidas diplomáticas para intentar estabilizar la situación en Venezuela.
El embajador de Venezuela ante la OEA, Bernardo Álvarez, dirigió una carta solicitando cancelar la reunión, donde argumentó que “es una puerta a la intervención que los Estados miembros han rechazado abrir”
Con la reunión de este jueves se continuará el escrutinio de la situación venezolana, ya que el pasado martes 21 de junio la sede del organismo regional, en Washington, recibió al expresidente de Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, quien tomó la palabra para llamar a los países del continente a apoyar una mediación que conduce junto con los exgobernantes de República Dominicana, Leonel Fernández y de Panamá, Martín Torrijos.
Rodríguez Zapatero defendió la “plena imparcialidad” de su búsqueda por concretar un diálogo entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y las fuerzas opositoras que controlan actualmente el Parlamento e impulsan un referendo revocatorio contra el mandatario.
Este llamado responde al pedido extendido por la ministra de Exteriores venezolana, Delcy Rodríguez, a Rodríguez Zapatero, en el que lo invita a presentar su iniciativa de mediación para contrarrestar la sesión del jueves. Allí, la ministra arremetió contra Almagro, señalando que el llamamiento del exministro uruguayo a aplicar la Carta Democrática “obstaculiza” la tentativa de diálogo.