En Colombia los guerrilleros de las FARC y el presidente Juan Manuel Santos van a realizar una reforma rural integral. Quieren repartir tres millones de hectáreas de tierras cultivables para formar una sociedad de pequeños y medianos propietarios. Todo esto porque a los guerrilleros les parece que la tierra en Colombia está muy concentrada y que hay que atacar a los grandes empresarios agrarios.
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Lo que se viene en nuestro país no es más que la aplicación del modelo socialista de redistribución de la tierra que ya se ha llevado a cabo en países como Cuba. Quienes apoyan la idea del gobierno Santos y los guerrilleros de las FARC de realizar un fondo de tierras para repartirlo en pequeñas parcelas, parecen no entender que un campesino gana mucho más cuando logra ser empleado por una gran empresa de agricultura, con alta tecnología y grandes economías de escala, que a quien le entregan un pequeño pedazo de tierra y se dedica a cultivarlo sin ningún tipo de tecnología.
En la videocolumna de hoy, además, nos preguntamos de dónde van a salir esas hectáreas de tierra que exige la guerrilla de las FARC. En los acuerdos Santos-FARC se contemplan diferentes mecanismos para la obtención de estas tierras, sin embargo el más importante y el más peligroso es la expropiación. Se habla de que la propiedad privada debe estar sujeta al interés social y ecológico, es decir, si el gobierno considera que algún predio no está en línea con lo que ellos llaman “interés social”, que no es más que su voluntad, ese predio puede ser expropiado.
En la videocolumna del PanAm Post analizamos los últimos acontecimientos del mundo iberoamericano desde una óptica liberal. Es presentada por Vanesa Vallejo, economista, miembro del Movimiento Libertario colombiano y columnista del PanAm Post.