Ecuador está polarizado. Mientras que la mitad de los ecuatorianos apoyan a Lenín Monero y la continuidad de las políticas de Rafael Correa, la otra mitad quiere frenar el avance del socialismo del siglo XXI. La situación en el país suramericano no es fácil. La mitad de los ciudadanos tienen sospechas que les han robado las elecciones y el CNE (Consejo Nacional Electoral) ha negado esta semana la posibilidad de realizar un recuento de los votos.
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Para algunos, hechos como el triunfo de Moreno y la negativa del CNE a realizar un recuento de los votos, así como la continuación del socialismo del siglo XXI y los acontecimientos de represión que han vivido los ecuatorianos en los últimos meses, son una señal que Ecuador va camino a ser como Venezuela. Sin embargo, otros, más optimistas, afirman que en su país no se podría dar lugar a una dictadura porque ni el pueblo ni los militares lo permitirían.
La situación de Ecuador es preocupante, tanto en el corto plazo, en el que hay que solucionar el problema de un país polarizado, con una mitad dirigida por Guillermo Lasso que insiste en que hubo fraude electoral. Como las inquietudes de mediano y largo plazo, respecto a las consecuencias negativas que cuatro años más de continuidad del socialismo del siglo XXI podrían traer a los ecuatorianos.
Nuestro invitado de hoy es Pablo Zambrano Pontón, economista y profesor de la Universidad Central de Ecuador. Con él hablaremos de los retos que enfrentan los ecuatorianos, de las protestas que tienen lugar en este momento en ese país, así como de la reacción de la oposición ante la decisión del CNE y, en general, de si será posible que el 50 % de la población, los que votaron por Lasso, sean capaces de frenar el avance del socialismo del siglo XXI que tanto mal le ha hecho a ese país.