La política venezolana genera controversia una vez más con la destitución del ministro de planificación, Jorge Giordani, en la noche del pasado martes. Ese mismo día, salió a la luz pública una carta titutlada “Testimonio y responsabilidad ante la historia”, que al parecer fue escrita por el ministro pocos días antes de que las elecciones del 14 de abril del pasado año tomaran lugar, donde cuenta su trayectoria de trabajo de la mano del difunto expresidente Hugo Chávez Frías.
En la carta se narran los hechos que tomaron lugar durante el Gobierno de Chávez, como también durante enfermedad, la cual Giordani afirma haber sido causada por la entrega total del mandatario a su país que lo llevó a descuidar su salud. También hace énfasis en la llegada de Maduro al poder y las deficiencias que fue adquiriendo su gobierno.
“El distanciamiento de las relaciones con el Presidente electo Nicolás Maduro, comenzó en primer lugar con mi reclamo por la interferencia de unos asesores franceses en la operación del Ministerio de Planificación y Finanzas,” puntualiza Giordani en la carta.
El exministro considera que la gestión del presidente Maduro deja mucho que desear. Su incomprensión de la difícil situación económica por la que atravesaba el país cuando asumió el poder lo dejó abierto a influencias que más que ayudar, en realidad empeoraban la crisis económica, y no iba a pasar mucho tiempo antes de que el desabastecimiento apareciera en Venezuela.
Cuando Maduro fue electo presidente por un pueblo que seguía las instrucciones del difunto presidente Chávez aun después de su muerte, en seguida empezó a imponer medidas económicas que se distanciaban del plan “estructurado” que había presentado el exministro de Planificación. Esto causó confusión y alta preocupación a Giordani, lo que lo llevó a analizar la situación a fondo y proponerse dos proyectos que podrían solucionarla: “El primero, atacar la corrupción frenándola con un nuevo control de los grandes fondos del Estado. El segundo, introduciendo nuevos mecanismos de manejo en el gasto público que le permitieran retornar a niveles sostenibles en el tiempo”.
Giordani califica de “doloroso y mediocre” el hecho de que una presidencia no sea capaz de poner a su país sobre bases sólidas. Dice que a raíz de todos los hechos alarmantes que han sucedido desde que Chávez no está a cargo de la administración del país, reina una sensación de “vacío de poder” en la presidencia, pero que se ha contagiado a otros centros de poder, llegando incluso a generar una incógnita en cuanto a las manos que gestionan a las empresas del Estado: ¿Siguen perteneciendo al Estado o están a punto de independizarse?
Por otro lado, el presidente de Venezuela informó durante la transmisión de su programa “En Contacto con Maduro” que Ricardo Menéndez, ministro de Educación Universitaria, sustituirá a Giordani en sus tareas como ministro de Planificación. También anunció que al Ministerio de Planificación se le agregaría como tarea “el desarrollo territorial”.
“He decidido fusionar la vicepresidencia de planificación con la vicepresidencia de desarrollo territorial porque hace falta tener una visión del desarrollo del plan de la patria en el desarrollo real de todo el territorio de Venezuela”, aclaró el presidente.
La agencia de noticias Reuters llevó a cabo una evaluación sobre la destitución del exministro de Planificación y la crisis económica que atraviesa el país, en la cual afirma que “el gobierno de Maduro ahora persigue la estrategia opuesta, buscando unificar un sistema de control de cambios de tres niveles que está plagado por la corrupción e incapaz de ofrecer a las empresas dólares necesarios para importar piezas de maquinaria y materias primas”.
Giordani termina su carta diciendo que a pesar de la muerte de Hugo Chávez, él siguió brindando su colaboración al gobierno y desempeñando su cargo como siempre lo hizo. Sin embargo, se negó a participar en la decisiones que se desviaban completamente del plan estructurado que él ofrecía.
“Luego de la muerte del Comandante Chávez, como se expresa en esta nota, decidí seguir colaborando en el gobierno, en el lugar que se me asignó, poniendo siempre por escrito a la dirección política del proceso, no solo mis discrepancias, sino también propuestas concretas, que ni siquiera fueron comentadas, pero que son hoy aval de mi comportamiento y mi lealtad a la revolución”, recalcó el exministro.