El diario Bloomberg reveló en días pasados que Biden prepara el mayor aumento de impuestos en casi 30 años, y precisa que “el paquete de impuestos incluirá un aumento de 21 % a 28 % en la tasa del impuesto corporativo, así como un incremento en el impuesto sobre la renta para las personas que ganen más de 400.000 dólares anuales”.
Es evidente que contradice totalmente las políticas del expresidente estadounidense Donald Trump de recorte de impuestos, que produjo que por ejemplo “la producción manufacturera y los empleos, también registraran un saldo notable en 2018. También ha habido una caída en el número de estadounidenses que dependen de los apoyos alimentarios gubernamentales”, reseña El Economista.
No solo en 2017 Trump realizó recortes de impuestos, sino que también en agosto de 2020 el republicano emitió una orden ejecutiva con la que aliviaba la carga tributaria a los empleados hasta fin de año para así evitar despidos, lo cual también fue criticado por Biden, quien alegaba que se trataba de una “guerra imprudente contra la Seguridad Social”.
¿Y qué pasa con Colombia?
En el marco de la Asamblea 61 del Banco Interamericano de Desarrollo que tiene como anfitrión a la ciudad de Barranquilla, en Colombia, el presidente Iván Duque manifestó en Twitter sus planes en materia impositiva mediante las siguientes palabras: “No imponer gravámenes a productos ni servicios básicos de las familias, y buscaremos congelar gastos de personal y adquisición de bienes y servicios en 2022, 2023 y 2024”.
Si los anuncios del presidente Duque se convierten en realidades, Colombia podría al menos mantenerse en medio de la grave situación en el territorio nacional, y es que “hasta el momento, la factura económica de la crisis generada por la expansión del COVID-19 en Colombia ha dejado una tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) nunca antes vista en la historia del país, con una caída de -6,8 %, a más 3,75 millones de personas desempleadas y una confianza industrial que se desplomó a niveles de 1980”, explica La República.
Las izquierdas se caracterizan por el excesivo gasto público que va en “crescendo” durante sus mandatos, desgastando las finanzas públicas, con una tendencia al endeudamiento desbordada, que lleva a la pobreza del pueblo, al cierre de empresas, a la quiebra y al desastre al final del día.
Lo que viene
Aunque Colombia siempre ha sido el mejor socio del país del norte, no solo con la gestión de Duque sino en general, ahora con lo que pretende hacer Biden es imperativo estar preparados, ya que los golpes económicos que reciban los estadounidenses, se resienten en Latinoamérica.
Evitar el endeudamiento, generar alivios tributarios al empresariado y los estímulos a la producción, que van en la línea de los propuesto por el presidente Duque, puede ser de momento, la salida a la situación que se avecina fruto de las irresponsabilidades de Biden y el Partido Demócrata.
Habrá que ver si las propuesta de Duque para el 2023 y 2024 son respetadas por el siguiente gobierno ya que desafortunadamente Colombia no se ha caracterizado por darle continuidad a las buenas medidas de los mandatarios salientes.